El señor Manuel Alvarado ha vivido gran parte de su vida en el municipio de San Francisco de Borja. Los caminos rurales, que unen las pequeñas comunidades, normalmente no son pavimentados o tienen una capa delgada de asfalto, son más angostos, las curvas son más cerradas que las de una carretera. En los últimos años, dice Alvarado, ha notado un incremento en los trabajos de mantenimiento de los caminos, y lo que definitivamente mejoró la conectividad entre pueblos es la carretera de San Francisco de Borja hasta Santa Ana.
Manuel Alvarado es albañil, hizo unos trabajos en la secundaria “Filomeno Parra Castillo 3051” y en varias escuelas y casas de la región. Los centros educativos de esta zona se encuentran en la cabecera municipal y sólo dos están en la comunidad de Tepórachic.
“La verdad yo todos los días veo como padres de familia recorren distancias largas, ya que algunos vienen desde muy lejos, para poderle dar una alternativa de educación a sus hijos, pero hemos visto cambios como el tramo que construyeron, el que comunica a las localidades de Santa Rosa, Guadalupe, Santa Ana y Avendaños con la cabecera municipal; todavía le falta a ese camino, pero antes estaba la terracería y no se le hacían rastreos, yo pensaba que no se iba a pavimentar nunca, pero ya vimos mejorías ,” dice Alvarado.
Las comunidades con mayor número de habitantes y las más conocidas del municipio son Tepórachic, Guadalupe, Sahuarichi, Santa Ana, La Esperanza, Santa Rosa y Avendaños
Para trasladarse a las demás comunidades del mismo municipio la vía era por terracería, que aun cuando se le daba mantenimiento con regularidad en época de lluvia se complicaba el acceso a dichas localidades.
Además del tránsito de automóviles particulares, existe una empresa de autobuses de pasajeros llamada “Tarahumara”, la cual realiza sólo una salida al día con destino a la capital del estado, y una salida proveniente de la ciudad de Chihuahua. La otra línea de autobuses “Nonoava” viaja cada tercer día, desde su cabecera del vecino municipio. En general, el acceso es limitado, según comenta Manuel Alvarado.
“Ahora con esta nueva pavimentación han sido muchas las poblaciones beneficiadas y es mucho menos desgaste para carros. ¡Viera en época de lluvias se nos quedaban hechos un lavadero los caminos y luego con las crecientes de arroyos quedamos incomunicados”, comparte Manuel.
Esta pavimentación ha logrado acortar el tiempo de traslado entre una comunidad a otra, con lo que los pobladores de la región tienen mayor acceso a los servicios de salud en caso de alguna emergencia e incluso pueden abastecerse de insumos para sus necesidades.