Conecta con nosotros

Resto del mundo

Condenan a dos meses de cárcel a mujer que cacheteó a su hijo

Una madre española fue condenada a dos meses de prisión por dar «un par de bofetadas» a su hijo de diez años que se negó a ducharse y además se le ha prohibido acercarse al niño durante seis meses.

Este es el fallo de la Audiencia de la provincia de Pontevedra (noroeste) divulgado este jueves, y que confirma la sentencia emitida el pasado mes de julio por un juzgado de rango inferior de la ciudad del mismo nombre.

La madre, en esa ocasión, recurrió el fallo alegando que su actuación «debe entenderse amparada dentro de su derecho de corrección».

Los magistrados de la Audiencia, sin embargo, ratificaron que el comportamiento de la madre del menor es constitutivo de un delito de maltrato en el ámbito de violencia doméstica, al considerar probado que, en la noche del 20 de mayo de 2018, la mujer, que convivía con su hijo, le pidió que se duchase.

El niño se negó y ambos comenzaron una discusión verbal finalizada por la actuación de su madre, «dándole un par de bofetadas al menor», que le causaron eritemas en ambas mejillas, por lo que el niño recibió atención médica, aunque no necesitó medicamentos posteriormente.

El tribunal enfatizó que la facultad de los padres para corregir a sus hijos tiene como «límite infranqueable» la integridad física y moral de los hijos.

La reprensión ante una eventual desobediencia del menor nunca puede justificar el uso de la violencia que ejerció, ni admite, bajo ninguna óptica, considerar esa actuación orientada a su beneficio», manifiesta el fallo judicial.

La pena de prisión, en todo caso, podrá ser sustituida por el mismo tiempo de trabajos comunitarios.

Maestra da 40 cachetadas a alumno por no decir ‘presente’

La mujer no podrá aproximarse a su hijo a menos de 200 metros durante medio año y se le prohíbe, asimismo, la tenencia y porte de armas durante seis meses.

Excelsior

Resto del mundo

Cofece multa a Walmart por prácticas monopólicas: la batalla legal apenas comienza

La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) asestó un golpe histórico al multar a Walmart de México con 93.4 millones de pesos tras concluir una investigación que se extendió por más de cuatro años. La razón: prácticas monopólicas relativas, particularmente en el trato con sus distribuidores.

Según el dictamen de la Cofece, Walmart aprovechó su posición dominante en el mercado para imponer condiciones desfavorables a los proveedores, afectando la competencia en el sector. Aunque no se han revelado todos los detalles de las “contribuciones” impuestas a los distribuidores, el veredicto destaca cómo estas prácticas distorsionan el acceso al mercado y perjudican a competidores más pequeños.

En respuesta, Walmart no tardó en reaccionar. La empresa anunció que impugnará la decisión y enfatizó su compromiso con el cumplimiento de las leyes mexicanas. En su comunicación oficial, destacó que la sanción carece de fundamento y que está basada en interpretaciones erróneas. Este movimiento era predecible: para una empresa de este tamaño, 93 millones de pesos no solo representan una cifra considerable, sino también una amenaza a su reputación.

Por otro lado, la Cofece también se juega mucho. Este caso es una muestra clara de su intención de reforzar la vigilancia sobre los gigantes corporativos. Sin embargo, una batalla legal prolongada podría poner a prueba su capacidad de defender sus resoluciones en tribunales.

Más allá de la multa, el caso de Walmart pone el reflector sobre una problemática común en el comercio minorista: el desbalance de poder entre grandes cadenas y pequeños distribuidores. Si bien el desenlace de este litigio aún está por definirse, el mensaje es claro: los días de actuar sin consecuencias podrían estar contados. La industria y los consumidores estarán atentos a cada movimiento en esta batalla judicial.

 

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto