De día, de noche y de madrugada, se escucha el sonido que emite la máquina de escribir de Keira Rathbone, para ella es música patrocinada por las hojas continuas llenándose de letras, pero lo que esta artífice hace durante horas, no son las palabras que cobijan una novela ni el ritmo de una batería, sino letras que retratan la realidad en la que habita.

Keira Rathbone es una artista británica que utiliza una máquina de escribir para trazar con letras y signos lo que se pare frente a su vida. Estudió arte en la Universidad de Bristol, constantemente busca perfeccionar esta técnica que le ha valido reconocimiento en varias partes del mundo y que le ha brindado la oportunidad de viajar, de enriquecer su percepción, así como el arte de otras culturas: “Cada máquina es como una paleta diferente, cada una tiene su propia personalidad y símbolos particulares”.

Lo más sorprendente de los rostros y paisajes que realiza, es el notable realismo y expresión que cada uno de ellos contiene. La artista utiliza su mano derecha para pulsar las letras y la izquierda para desplazar el papel arriba y abajo; para las zonas oscuras utiliza cientos de letras agrupadas y solamente unas decenas para las zonas claras, en ocasiones ocupa su tinta roja para darle pequeños detalles de color. Este tipo de obras (realizadas con precisión) pueden tardar hasta meses.

Es interesante destacar que Keira Rathbone es un ejemplo de aquello que ha significado el ser innovador y constante pues, esta ciudadana del mundo, lo ha demostrado por medio de su estilo y arte.

¿Por qué dibuja con letras? Porque es una artista mediática, porque es una contadora de historias que dibuja con puntos y comas, porque la mente se le pierde si no tiene en quien pensar para escribirlo.