Santiago González Reyes, director de Derechos Humanos del municipio y responsable del albergue, dijo que durante el recorrido las diplomáticas tuvieron la oportunidad de entrevistarse con sus connacionales que se encuentran alojados en este lugar, brindando atención personalizada para el trámite de documentos y para conocer sus necesidades.
Como gesto de solidaridad, también llevaron consigo alimentos tradicionales de El Salvador, como las pupusas, para compartir con las personas alojadas en el lugar.
González Reyes informó que se llevó a cabo una detallada presentación de la metodología de trabajo, el reglamento y el manual de procedimientos que rigen el funcionamiento del albergue.
Además, se proporcionó información sobre la sistematización del espacio y se presentaron los programas y servicios disponibles para las personas en situación de movilidad.
El recorrido abarcó diversas áreas esenciales del albergue, permitiendo a las visitantes explorar el consultorio médico, la biblioteca, la escuela para regularización educativa, los dormitorios, el área de maternidad, los baños y la zona de ejercicio y calistenia.
González Reyes destacó que el albergue se distingue por ofrecer una amplia gama de servicios y programas diseñados para abordar las necesidades integrales de los migrantes. Además de las comodidades básicas se proporcionan servicios educativos, culturales y de salud, así como asesorías migratorias para aquellos que requieran orientación sobre sus derechos y opciones legales.
Al término del recorrido, tanto la cónsul general como la vicecónsul expresaron su admiración por la destacada labor que se realiza en favor de las personas en situación de movilidad en el albergue «Kiki» Romero.
Además, reafirmaron su compromiso y solidaridad para continuar trabajando de manera coordinada en beneficio de este grupo vulnerable, subrayando la importancia de la colaboración entre instituciones para brindar apoyo integral a los migrantes.