Con fines políticos o sin ellos, finalmente se concretó la extradición del ex gobernador César Duarte Jaquez, ese que fue señalado y perseguido por Javier Corral y hoy en la administración de Maru Campos se logró repatriar para enfrentar cargos de corrupcióny asociación delictuosa.
Apenas señalaban los morenistas de Chihuahua que la reforma judicial de Maru beneficiaría y traería la libertad de Duarte, cuando minutos después se daba la noticia de su traslado a México.
Duarte ya durmió (o quizás no) bajo el cielo que tantas veces bendijo, el de Chihuahua, y ahora se prepara para una férrea pelea legal, no sin antes saber que esta administración prometió que no habrá olvido y mucho menos perdón.
Ahora el reto de Campos Galván es callar aquellas voces que juran y perjuran que con ella al frente del Ejecutivo quedará en libertad.
El otro reto es salvaguardar la integridad del ballezano, quien tanto dijo que su vida estaría en peligro de pisar un penal chihuahuense, pues enemigos sí que los tiene y bastantes.
……
Otro asunto a resaltar sobre la extradición del César es ver qué tanta información pudo haber soltado a los gringos con la finalidad de una libertad que no se logró.
Ahora los testigos protegidos jugarán un papel sumamente importante y quizás decisivo para el futuro de Duarte, incluso aquel que encaró a Maru el pasado martes por la noche para confiarle cómo es que terminó diciendo todo lo que declaró a las autoridades locales.
Ahora bien, que si Duarte está muy lejos de recuperar la libertad no lo hará solo y varias cabezas habrán de rodar, incluso unos cuantos podrían volver a pisar la prisión.
……
En Chihuahua y el centro del país no hubo quien no celebrara el regreso de Duarte a México.
Por su parte los panistas están más que orgullosos de lo que se ha hecho, aunque deberán reconocer que si no hubiera sido por Javier Corral, que ahora se les revuelve el estómago de solo pensar en él, no estaríamos viviendo este capítulo en la entidad.
En cuanto a Morena, les servirá para echarle tierra tanto a priistas como panistas, afirmando que Duarte sería perdonado solo si devuelve los miles de millones que se asegura desvío de las arcas públicas.
……
A los que de plano les cayó como balde de agua fría fue a los tricolores, pues sus opositores tendrán mucha tela de donde cortar previo a la elección de gobernadores en varios estados.
El discurso de cajón es que si es culpable tiene que pagar por lo que hizo y que no se deberá de señalar a todos los priístas por el actuar de unos cuantos.
Lo malo es que no solo fue el ex de Chihuahua sino de varias latitudes, incluso hay que recordar que el propio dirigente nacional, Alito Moreno, es actualmente señalado por una y mil linduras.
……
Otro dato a destacar y no por eso menos importante, fue la operación del canciller Marcelo Ebrard, quien previo a la elección en 6 estados, logra extraditar con un timing político perfecto para enviar un mensaje muy claro:
Aquel gobernador que meta las manos en la elección puede verse en el espejo donde hoy se encuentra el ex gobernador de Chihuahua.
Y es que por más bravos o valientes que los políticos se puedan ver mientras el hueso está, hoy ven las consecuencias con un Duarte esposado y vulnerable, que ni todos los millones que pueda poseer le regresan en este momento la preciada libertad.