Corea del Norte acusa a México de retener uno de sus buques
Corea del Norte acusó este miércoles a México de retener ilegalmente uno de sus buques después de que se quedase varado en aguas del golfo de México en julio del año pasado.
Corea del Norte acusó este miércoles a México de retener ilegalmente uno de sus buques después de que se quedase varado en aguas del golfo de México en julio del año pasado.
Según denuncia Pyonyang, el Mu Du Bong es un legítimo barco comercial, y su retención representa una «flagrante violación» de su soberanía.
Pero un experto de Naciones Unidas asegura que el barco pertenece a la empresa norcoreana Ocean Maritime Management (OMM) y que está en la lista negra de la ONU de las naves usadas para evadir las sanciones impuestas por su programa nuclear.
En julio de 2013, uno de los barcos de esa compañía que provenía de Cuba fue retenido en Panamá, después de que se descubriera que transportaba armamento de la era postsoviética no declarado escondido entre sacos de azúcar.
Las sanciones de la ONU prohíben la mayoría de envíos de armas a Corea del Norte.
Según las resoluciones adoptadas tras las pruebas nucleares desarrolladas por Pyonyang en 2006 y 2009 , las exportaciones a Corea del Norte de armas y otros materiales relacionados, con la excepción de armas pequeñas y ligeras, están prohibidas.
«México no fuerza ninguna detención»
El barco Mu Du Bong encalló en un arrecife de la costa del estado mexicano de Veracruz en julio de 2014.
El gobierno mexicano dice que quedó varado en un «área natural protegida» donde provocó «graves daños ambientales».
Corea del Norte alega que su gobierno pagó desde entonces una fianza para cubrir esos daños.
En una conferencia de prensa en la sede de Naciones Unidas este miércoles, el representante de Corea del Norte ante la ONU, An Myong Hun, dijo que el barco y su tripulación deben ser liberados.
«Este barco es un navío totalmente pacífico y legítimo que navega bajo la dirección del Ministerio de Transportes», sostuvo. «La detención del Mu Du Bong es una flagrante violación de la dignidad y soberanía de Corea del Norte».
Sin embargo, la cancillería mexicana asegura que los 33 tripulantes norcoreanos del barco no están retenidos, sino que tienen libertad de tránsito y que, como no han cometido delitos, serán repatriados con asistencia de la embajada de Corea del Norte.
En un comunicado de prensa, las autoridades mexicanas sostienen que en el barco no se encontró ningún cargamento ilegal pero que la propiedad del buque está vinculada a una empresa sancionada por el Consejo de Seguridad de la ONU.
«El gobierno de México no está forzando ninguna detención», indica la cancillería mexicana al señalar que el buque está retenido para cumplir con los convenios y legislaciones internacionales.
Lista negra de la ONU
Para Hugh Griffiths, quien coordina el programa sobre tráfico ilícito y seguridad marítima del Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI, por sus siglas en inglés), hay «apabullantes» evidencias que muestran que el barco está vinculado a la empresa OMM, que entró en la lista negra de la ONU en julio de 2014.
Según Naciones Unidas, la compañía jugó un papel importante en la gestión del navío con las armas escondidas que fue encontrado en Panamá.
El Chong Chon Gang fue retenido en el Canal de Panamá el 15 de julio de 2013 con la sospecha de que llevaba drogas.
El navío había desaparecido de los sistemas de vigilancia vía satélite durante varios días cuando se acercaba a La Habana, tres meses después de su partida de la costa oriental de Rusia.
Pero lo que las autoridades panameñas encontraron entonces en el interior del barco fue armamento pesado, incluyendo un equipo de misiles y vehículos pesados.
Según dijeron las autoridades cubanas entonces, el barco llevaba 240 toneladas de armas defensivas «obsoletas».
El gobierno norcoreano insistió que las armas antiguas sólo estaban siendo trasladadas a Corea del Norte para ser reparadas, antes de devolverlas a Cuba.
Pero la entonces representante estadounidense en la ONU, Samantha Power, describió el episodio como un «intento ilegal, cínico e indignante» por parte de Corea del Norte y Cuba de evadir las sanciones de la ONU.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.