En la Sierra impera la Ley del Crimen. El nuevo amanecer no ha llegado a la Sierra Tarahumara, donde fue asesinado Isidro Baldenegro López, activista social indígena, quien dedicó su vida a proteger el bosque de Coloradas de la Virgen, razón por la cual fue detenido junto con su vecino por judiciales, quienes le sembraron armas largas y semillas de mariguana para hacerlo pasar por narcotradicante.
El primer asesinato emblemático del nuevo gobierno. Si bien hubo 19 ejecuciones el fin semana y otras tantas en los siguientes días, el caso de Baldenegro es política y socialmente relevante pues se trata de un activista víctima del estado y de los delincuentes, reconocido por el Premio Goldman en San Francisco. Según testigos, sus asesinos ya le han quitado la vida a otras personas que se oponen a la tala clandestina de sus tierras.
Nadie lo protegió. A pesar de su decidida defensa de los recursos naturales y los territorios ancestrales de su pueblo, su hermano estuvo a punto de ser asesinado hace poco más de un año, y él mismo tuvo que desplazarse con su familia. Entre sus acciones se encuentra el bloqueo de carreteras para cerrar el paso a camiones madereros que operaban a pesar de la prohibición de un juez. A pesar de todos estos antecedentes, no gozaba de protección y las autoridades ni enteradas de su muerte. La impunidad en todos los crímenes, pero en especial este, marcará si en verdad hay un nuevo modo de gobernar o todo será más de lo mismo.
Efecto Trump podría desatar más violencia. Así temen los gobernadores fronterizos que se aliaron contra el gasolinazo, Trump y en general el maltrato de la federación, pues el Instituto Nacional de Migración ya les dejó claro que, igual que el resto del gobierno, no tiene un plan, ni presupuesto ni nada preparado para recibir a potenciales oleadas de deportados, quienes estarían en el abandono total, sin un peso en la bolsa y expuestos a la seducción o al ataque de los cárteles de la droga que ya los esperan como los tiburones a las focas, pues ellos sí que tienen un plan.
Violencia, ¿atizada por el gobierno? Llama la atención cómo se ha disparado la violencia en los últimos días en todo el país, a la vez que se decreta “código rojo” en Cancún, una de las capitales mundiales de turismo, la mayor entrada de divisas para el país después de los paisanos. Balacera en Playa del Carmen, tiroteos en Cancún, narcomantas, terror, gasolinazo, y todo pinta para empeorar en los próximos meses. Ahora sí está la mesa servida para un estallido social, y justo ahora es cuando el presidente y sus aún fieles insisten en dotar al Ejército de más facultades contra civiles. Si esta violencia no es generada por obra suya, sin duda lo es al menos por omisión.
Politiquería se impone entre gobernadores. Así, llama la atención que la alianza entre gobernadores fronterizos haya sido desairada precisamente por los dos priístas: Claudia Pavlovich, de Sonora, y Ricardo Moreira, de Coahuila, quienes no asistieron al encuentro donde el tema central fue las deportaciones que podrían tener lugar en la administración de Donald Trump, según por orden de la presidencia pues el gobierno de Peña Nieto y el aprendiz Videgaray aún le apuestan a agachar los cuernos y lamerle las botas al magnate bulero, como un perro que enrolla el rabo para que no le den más patadas.
Corral y Cabada, el reencuentro. Pero mientras el gobernador está abriendo frentes de guerra contra la Federación y contra el propio Trump en busca de ganar popularidad y responder a las exigencias de los gobernados, al parecer prefirió cerrar el pleito con el alcalde de Juárez, Armando Cabada, a quien abrazó como los amigos de años que dicen ser, y tras la salida del impresentable Jorge González Nicolás, encubridor del duartismo. Hasta foto se sacaron y aunque sea de dientes para fuera parece que ahora sí comenzarán a trabajar coordinados por el bien de los maltratados juarenses.
Presenta gabinete su 3 de 3. Ayer el gobernador y su gabinete presentaron su declaración patrimonial, fiscal y de intereses, en un paso inédito en el gobierno de Chihuahua, pues por primera vez los chihuahuenses sabremos con cuánto llegan, cuánto pagan de impuestos y qué intereses podrían chocar con su ejercicio público, como su participación en empresas, asociaciones y otros negocios o prioridades. Lo interesante será saber con cuánto se van.
Un paso (insuficiente) hacia la transparencia. Si bien es una herramienta que muestra buena disposición y apertura, y que facilitaría rastrear con cuánto llegaron y con cuánto se fueron, lo cierto es que no blinda contra transas y habrá que complementarla con el seguimiento a la Ley, un equilibrio institucional y una verdadera rendición de cuentas. Por lo pronto van bien, pero no se puede cantar victoria.
Panistas como dicen una cosa, dicen otra. Y es que si nos dejamos llevar por ejemplos como el de Ricardo Anaya, dirigente nacional del PAN, quien un día vota a favor de la Reforma Energética y otra instala módulos contra el gasolinazo, estamos fritos. La amnesia es un mal común en los políticos de tooodos los partidos, y ahora el joven queretano ya desplegó 100 módulos para que los ciudadanos se quejen por las medidas que él y su partido aprobaron. Por cierto, Gustavo Madero fue uno de los arquitectos de dichas reformas, y ahora se queja desde el gabinete.
Chavira, cabeza de la Cruz Roja. Como ya es tradición, la Cruz Roja nombró presidenta honoraria a Cinthia Chavira, quien no sólo es la esposa del gobernador, sino una hábil periodista y política con trayectoria y peso propio, quien aconseja y delinea muchas de las acciones puestas en marcha por su marido. Aunque muchos no lo noten, la mano de Chavira tiene mucho más peso que el de otras parejas de gobernadores, y al parecer para bien.
Merodio, avanza poco a poquito. Otra mujer que está demostrando de qué está hecha es la senadora Lilia Merodio, quien a pesar de la vergüenza de haber aprobado el gasolinazo en sintonía con su presidente y su partido, ha sabido flotar en el pantano priista y ha ido ganando espacios, como el nombramiento de Paola Karina Arroyo como delegada del Registro Agrario Nacional, la funcionaria que fue despedida por Javier Garfio por apoyar a la juarense. Ya tiene un taloncito más dentro de la dirigencia del PRI estatal, pero la moneda aún está en el aire.