Conecta con nosotros

Resto del mundo

Crean aguacate sin semilla porque la gente no sabe usar cuchillos

Llegará el día que los aguacates nos aburran? A pesar de ser los responsables de llevar a los jóvenes a la quiebra, crear mercados negros, y cortar nuestras manos, no podemos dejar de comerlos.

Precisamente cuando creímos que nuestra cremosa fruta verde favorita no podía ponerse mejor, esta semana nos encontramos con un descubrimiento emocionante: los aguacates sin semilla ya son una realidad.

El «oro verde» sin semilla, cuya cáscara también es comestible, se vende en algunos supermercados del Reino Unido. Su nueva composición genética te permite ahorrarte la extraordinaria cantidad de dos minutos al no tener que quitarle el hueso con una cuchara o cuchillo. ¡Regocíjense!

Conocidos como «aguacates de coctel», las famosas frutas crecen en España en los meses decembrinos, y suelen ser recogidos por restaurantes y no por las grandes cadenas de supermercados; al menos no hasta el momento. Nunca más tendremos que rompernos la cabeza intentando quitarles la semilla o cortándolos en juliana. Lo único que tienes que hacer ahora es tomarlo y meterlo directo a tu boca.

Similar a un pequeño calabacín y con una longitud de entre cinco y ocho centímetros, los aguacates sin semilla son el resultado de una flor de aguacate que no fue polinizada. Cuando la flor de la fruta se salta este proceso, crece sin su peculiar semilla. El resultado es una fruta sin hueso ligeramente más pequeña que podría hacer de la terrible «avocado hand» cosa del pasado.

La cadena de supermercados Marks & Spencer recibió la primera dotación de aguacates sin semilla que pondrá a la venta en todo el Reino Unido durante este mes.

Si puedes conseguir una de estas maravillas sin hueso, te sugerimos que gastes los dos minutos que te ahorraste haciendo algo productivo.

Resto del mundo

Cofece multa a Walmart por prácticas monopólicas: la batalla legal apenas comienza

La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) asestó un golpe histórico al multar a Walmart de México con 93.4 millones de pesos tras concluir una investigación que se extendió por más de cuatro años. La razón: prácticas monopólicas relativas, particularmente en el trato con sus distribuidores.

Según el dictamen de la Cofece, Walmart aprovechó su posición dominante en el mercado para imponer condiciones desfavorables a los proveedores, afectando la competencia en el sector. Aunque no se han revelado todos los detalles de las “contribuciones” impuestas a los distribuidores, el veredicto destaca cómo estas prácticas distorsionan el acceso al mercado y perjudican a competidores más pequeños.

En respuesta, Walmart no tardó en reaccionar. La empresa anunció que impugnará la decisión y enfatizó su compromiso con el cumplimiento de las leyes mexicanas. En su comunicación oficial, destacó que la sanción carece de fundamento y que está basada en interpretaciones erróneas. Este movimiento era predecible: para una empresa de este tamaño, 93 millones de pesos no solo representan una cifra considerable, sino también una amenaza a su reputación.

Por otro lado, la Cofece también se juega mucho. Este caso es una muestra clara de su intención de reforzar la vigilancia sobre los gigantes corporativos. Sin embargo, una batalla legal prolongada podría poner a prueba su capacidad de defender sus resoluciones en tribunales.

Más allá de la multa, el caso de Walmart pone el reflector sobre una problemática común en el comercio minorista: el desbalance de poder entre grandes cadenas y pequeños distribuidores. Si bien el desenlace de este litigio aún está por definirse, el mensaje es claro: los días de actuar sin consecuencias podrían estar contados. La industria y los consumidores estarán atentos a cada movimiento en esta batalla judicial.

 

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto