Tras realizar un diagnóstico sobre los efectos generados de la sequía en el estado de Chihuahua, donde se avistan severos daños en la agricultura de temporal en los cultivos de frijol, maíz de autoconsumo, papa, avena y sorgo, el secretario de Desarrollo Rural, René Almeida Grajeda solicitó la solidaridad del gobierno federal, para atender los estragos en la economía de los productores temporaleros y ganaderos.
Señaló que el delegado Juan Carlos Loera, ha estado ausente en los problemas de los productores del agro chihuahuense, tanto en el conflicto del agua que se extrae de manera inmisericorde de las presas de Chihuahua para cumplir con un tratado internacional, que no es solo de Chihuahua sino del país México con el país Estados Unidos de Norteamérica, como en los daños ocasionados por la sequía.
Tenemos severos problemas de sequía en el 90 por ciento de los municipios de la entidad, donde los efectos se reflejan ya en la pérdida casi total en el cultivo de avena y sorgo, y grandes afectaciones en los cultivos de frijol y de maíz tanto para consumo como del maíz forrajero, dijo.
Señaló que se tiene un gobierno federal distante, cuando se requieren soluciones rápidas para apoyar a los productores y a la comunidad indígena que no cosechará maíz, papa y calabaza.
Anteriormente existía el mecanismo del seguro catastrófico, pero no fue considerado en el presupuesto federal del 2020, y sobre el Fonden, requerimos la presencia de CONAGUA para certificar los daños de la sequía y la intervención del delegado Juan Caros Loera, quien está ocupado en asuntos de su futuro político.
Expresó el secretario Rene Almeida, que los chihuahuenses deben empezar a voltear a ver a sus conciudadanos de la zona serrana y de los municipios que viven de la siembra de temporal, porque tienen un futuro inmediato muy crítico.
Por ello, demandó la solidaridad del gobierno federal para atender estos efectos de la sequía en la población de Chihuahua. “Todos somos mexicanos y requerimos del apoyo de los actores del Gobierno Federal”, concluyó.