La Comisión Federal de Electricidad (CFE) parece haber perdido control sobre su personal, que realiza asaltos a despoblado, pues no es posible ver que a negocios que llevan cerrados más de 50 días les lleguen recibos con adeudos de hasta el doble de lo que pagaban cuando trabajaban, manifestó ayer Michel Salum Francis, presidente del Consejo Coordinador Empresarial.
“Hay que llegar hasta los altos jefes para que lo resuelvan, pero cada vez son más los abusos y no se puede estar llamándoles por cada anomalía que se presente”.
“El gobierno federal nos ordena cerrar nuestros negocios, le ordena a todos encerrarse en sus casas, nos deja a todos sin tener ingresos… luego no solo es la única autoridad que no ayuda a empresarios o a los ciudadanos, sino que además altera los recibos de luz, aumenta los cobros, y si no pagas, te cortan el servicio sin consideración alguna, por eso empezamos a verlos como ladrones y oportunistas que se aprovechan de la situación”, enfatizó.
Salum Francis declaró que los líderes empresariales de la entidad consideran convocar a las autoridades de la CFE a una reunión virtual para plantear esta situación y exigir una solución, sobre todo para que se dejen de aplicar cobros basados en estimaciones de su personal “en negocios cerrados desde hace casi dos meses”.
Sobre el tema, el presidente de la Canirac Yucatán, Roberto G. Cantón Barros, dijo que algunos de sus agremiados han detectado irregularidades en la facturación del consumo, pero la agrupación ha atendido estos casos y la CFE ha corregido dichas fallas.
Aunque no dio detalles, ni cifras de los montos reclamados ni número de casos de socios que reportaron cobro excesivo en la facturación, la Canirac reconoció que sí recibe las quejas de sus socios por el aumento del pago de este servicio sin justificación.