La huelga de camioneros en Brasil iniciada el 21 de mayo ya provocó la cancelación de 270 vuelos, algunos internacionales, mientras las pérdidas del sector por el paro, que dejó nueve aeropuertos sin combustible, superan los diez millones de dólares por día, informaron este muertes fuentes del sector.
La Asociación Brasileña de las Empresas Aéreas (ABEAR) dijo en una nota que, pese al acuerdo entre el gobierno y sindicatos para desmovilizar a los camioneros, se esperan retrasos y cancelaciones en los próximos días.
No existe todavía previsión de cuándo se restablecerá el servicio por completo, debido a la “ausencia de combustible en aeropuertos menores repartidos por el país”, según la ABEAR.
Decenas de miles de camioneros seguían este martes de huelga en 18 estados de Brasil y ocupan vías rápidas del país, que sigue afectado por el desabastecimiento de combustible y productos frescos, a pesar del anuncio del gobierno de que reducirá el precio del diésel, como exigían los huelguistas.
Nueve aeropuertos del país no tienen combustible, por lo que las aeronaves que llegan solo pueden volver a despegar si tienen reservas suficientes en los depósitos.
La huelga inició el lunes de la semana pasada como protesta de los camioneros para exigir una reducción urgente de los precios del diésel, que aumentó como consecuencia de la apreciación de los precios del petróleo a nivel mundial.
Petrobras, estatal brasileña que controla parte de las refinerías y reservas brasileñas de crudo, aplicó desde entonces sucesivas reducciones del precio para satisfacer las demandas de los huelguistas, lo que provocó su hundimiento en la Bolsa de Sao Paulo.
La medida, junto a la eliminación de un impuesto al combustible que debe ser votada esta semana por el Senado brasileño de urgencia, satisfizo a los sindicatos, que instaron a la desmovilización, pero unos 250 mil camiones siguen parados en las vías rápidas, un 30 por ciento del total de los que se manifestaron.