Conecta con nosotros

Increible

Descubren enfermedad mental de los perros que se persiguen la cola

Expertos de la Universidad de Helsinki, en Finlandia, hicieron un estudio que indica que la obsesión de los perros por perseguir su cola es una enfermedad mental.

Lo anterior puede estar influida por factores ambientales, alimenticios, traumas de cachorro e incluso puede ser una problema genético. Este TOC perruno es muy similar al que sufren los humanos.

El estudio sondeo a varios canes y entre los hallazgos encontró que los perros más tímidos y miedosos a los fuertes ruidos eran presas más fáciles de la obsesión por perseguir el rabo.

Las personas que tienen Trastorno Obsesivo Compulsivo lo pasan muy mal, algunos se lavan las manos 700 veces al día, se sacan cabellos o tienen otros tics y obsesiones extrañas. En los perros lo más general es perseguirse la cola, aunque algunos se obsesionan con perseguir sombras o luces, o chocan con las puertas que olvidan que no pueden abrir. El problema más grave es que el can en su desesperación puede perder pelo o autoinflingirse heridas con sus dientes.

Ecologistas en acción  

Clic para comentar

You must be logged in to post a comment Login

Leave a Reply

Increible

Desaparece en Disneyland y aparece días después en un bote de basura en Mexicali: el misterioso caso de Annie Encino

Una adolescente estadounidense de 16 años fue localizada con vida dentro de un contenedor de basura en Mexicali, Baja California, días después de haber desaparecido en el parque Disney California Adventure, en Anaheim. El caso ha despertado preocupación e interrogantes en ambos lados de la frontera, especialmente por el silencio mediático en México y las lagunas que aún rodean su cruce hacia territorio nacional.

Annie Kathleen Encino desapareció el pasado 20 de abril tras una discusión con su familia dentro del parque temático. Fue vista por última vez alejándose sola, lo que activó una Alerta Amber en Estados Unidos. Sin embargo, esa alerta nunca cruzó a territorio mexicano, dejando a la opinión pública del país sin conocimiento de su desaparición… hasta que la historia dio un giro tan insólito como alarmante.

Días después, una llamada anónima al 911 alertó a la policía municipal de Mexicali sobre la presencia de una menor dentro de un bote de basura. Al llegar al sitio, los oficiales encontraron a la joven en condiciones que no han sido detalladas, pero confirmaron su identidad. El consulado de Estados Unidos fue notificado de inmediato y su madre viajó a la ciudad fronteriza para identificarla y llevarla de regreso.

Hasta ahora, las autoridades mexicanas no han informado cómo fue que Annie cruzó la frontera sin documentos, sin acompañantes y sin ser detectada. Tampoco han revelado si fue víctima de trata, secuestro, abuso o si viajó voluntariamente con ayuda de terceros. La Fiscalía de Baja California mantiene abierta una investigación para esclarecer los hechos.

Lo que sí queda claro es que algo falló en los mecanismos de cooperación fronteriza. Ni la alerta internacional funcionó, ni hubo un protocolo binacional que permitiera actuar a tiempo. La aparición de una menor estadounidense en un contenedor de basura, en una ciudad donde los casos de desapariciones no son novedad, pone una vez más bajo la lupa la crisis de seguridad y el flujo irregular entre ambos países.

Mientras se esperan más detalles oficiales, el caso de Annie Encino evidencia que incluso en un entorno supuestamente seguro como Disneyland, la vulnerabilidad de los menores puede terminar en una historia digna de una serie policiaca.

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto