Acontecer
El estudiante héroe que detuvo a un atacante en Seattle
El jueves, cuando Briana Clarke escuchó sonidos de estallidos en un campus universitario en Seattle, pensó que el origen debía ser algo inocente, como globos que se habían reventado. Luego, vio a un compañero de clase que corría frenéticamente, diciendo que alguien había recibido un disparo.
Un pistolero abrió fuego en la Universidad de Seattle Pacific, un incidente en el que una persona murió y dos más resultaron heridas antes de que fuera abordado por un guardia de seguridad estudiantil, informó la policía de Seattle.
El pistolero estaba recargando una escopeta cuando el estudiante que lo abordó, quien trabajaba como un monitor del edificio, utilizara aerosol de pimienta y lo derribara, le dijo a los reporteros el capitán de la policía, Chris Fowler.
«Una vez estuvo en el suelo, otros estudiantes saltaron sobre ellos y sometieron al tirador», dijo.
El sospechoso, un hombre de 26 años que no era estudiante de la universidad, está en custodia.
Dicen creer que actuó solo, pero la investigación está en marcha. La policía no reveló un motivo.
KOMO, afiliada de CNN, identificó como Jon Meis al guardia de seguridad estudiantil que lo enfrentó.
Meis lleva un aerosol de pimienta como medida de precaución, dijo su compañero de habitación, Ryan Salgado, a The Seattle Times. El informe describió a Meis como un cristiano devoto y un estudiante dedicado.
Podría haber sido peor
En Otto Miller Hall, el edificio donde ocurrieron los disparos, Clarke vio estudiantes cubiertos de sangre.
«Cuando salí y vi que alguien yacía en el suelo, fue inquietante ver un montón de balas por ahí», dijo. «Ver que estaban tratando a mi amigo afuera fue difícil de creer».
Ella pensó que podría haber sido una víctima.
La policía está convencida de que el tirador habría herido a más personas si quienes estaban a su alrededor no hubieran intervenido.
«Esta historia no es acerca de un acto de maldad, sino acerca de las personas que pasaron por eso y se ayudaron unos a otros cuando las cosas se tornaron bastante trágicas», dijo el jefe auxiliar de la policía de Seattle, Paul McDonagh.
El sospechoso estaba armado con una escopeta, un cuchillo y más municiones, dijo.
Heridas de perdigón
El tiroteo inició en el vestíbulo del edificio, el cual alberga los departamentos de ciencia, matemática e ingeniería, donde el pistolero confrontó a tres personas y les disparó, dijo Fowler.
Un hombre de 19 años fue declarado muerto en Harborview Medical Center. Una mujer de 20 años se encontraba en condición crítica, y un hombre de 24 años se encontraba en condición estable, dijo.
Sufrió heridas de perdigón en el cuello y pecho, según una declaración de la policía. Una cuarta persona fue trasladada al hospital con heridas menores.
Los funcionarios inmediatamente cerraron el campus.
Sangre en el piso y las paredes
El presidente de la universidad, Daniel J. Martin, le dijo a KCPQ, afiliada de CNN, que encendió un monitor para ver imágenes de la cámara de seguridad del edificio Otto Miller Hall luego de que fuera alertado del tiroteo.
«Los estudiantes actuaron sin considerar su propia seguridad», dijo, mientras se le quebraba la voz por la emoción.
Jillian Smith estaba haciendo un examen de matemáticas cuando se enteró de que el campus había sido cerrado. Siguió con el examen hasta que escuchó gritos de los oficiales de la policía.
«Después de que nos enteramos por las redes sociales de lo que estaba ocurriendo, algunas personas lloraban y todo eso», dijo Smith a KOMO, afiliada de CNN.
La policía escoltó a los estudiantes fuera del edificio, donde ella vio sangre en el piso y las paredes del vestíbulo.
Blake Oliveria estaba en clase cuando escuchó los disparos.
Dijo que se quitó sus zapatos por si tenía que correr, pero permaneció en la clase hasta que la policía llegó para acompañar a los estudiantes hacia afuera.
«Vi sangre… en el piso», le dijo a CNN. «Había dos o tres charcos grandes y otros pequeños esparcidos por el pasillo».
Preguntas
La hija de Mary Jones estudia en Seattle Pacific, pero no resultó herida. Aun así, se pregunta qué tan seguras estarán las universidades sin que haya leyes que regulen el acceso a armas.
«¿Dónde están los controles para impedir que nuestros hijos adquieran una pistola u otro tipo de arma? ¿Y se necesitan controles gubernamentales para que eso no suceda? No lo sé», dijo a KOMO. «Tiene que haber un mayor entendimiento de qué puede hacer el arma, y el dolor que puede causarle a la vida de otra persona».
Seattle Pacific es una universidad cristiana con una población estudiantil de 4.270. Está ubicada en el vecindario Queen Anne de Seattle. La universidad canceló sus clases el viernes, informó en su sitio web.
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