El Gabinete de Seguridad de Israel aprobó este jueves por unanimidad un alto el fuego con la Franja de Gaza tras 11 días de confrontaciones palestino-israelíes, las más intensas desde 2014.
Según el comunicado, los ministros acordaron «aceptar la iniciativa egipcia de un alto el fuego mutuo sin condiciones, que entrará en vigor en una hora que se determinará más adelante», recoge el periódico The Times of Israel.
Por su parte, un representante de Hamás confirmó a Reuters que el alto el fuego será «mutuo y simultáneo» y entrará en vigor a partir de las 02:00 de este viernes (23:00 GMT del jueves), hora que también es reportada por medios israelíes.
Desde el movimiento también señalaron que respetarán el cese de fuego si Tel Aviv cumple con el acuerdo. El brazo armado de Hamás, las Brigadas de Ezzeldin Al Qassam, declaró que seguirá de cerca lo que haga Israel en las próximas horas. «Habíamos preparado un gran golpe, desde Haifa hasta Ramon [el aeropuerto de Eilat]. Observaremos de cerca el comportamiento del enemigo hasta las 2 de la madrugada y detendremos el enorme ataque que habíamos preparado para nuestro enemigo», señalaron.
La decisión del Gabinete israelí sobre un alto el fuego se produce después de que el presidente de EE.UU., Joe Biden, instara este miércoles al primer ministro del país hebreo, Benjamín Netanyahu, a buscar una «desescalada significativa» en el camino hacia un alto el fuego.
A su vez, el ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, aplaudió a las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y elogió los «logros militares sin precedentes en términos de contundencia, precisión e importancia estratégica en la lucha contra los grupos terroristas en la Franja de Gaza». El alto cargó agregó que el Ejército permanece en alerta máxima por ataques adicionales desde Gaza.
Entre tanto, en el sur de Israel, en las áreas fronterizas con Gaza, continuaron sonando las sirenas antiaéreas este jueves, según informaron las FDI.
De acuerdo con AFP, dos delegaciones de seguridad egipcias serán enviadas a Israel y la Franja de Gaza para «monitorear la implementación [del alto el fuego] y los procedimientos para mantener condiciones estables de forma permanente».
Escalada de tensiones
La escalada de las tensiones entre Israel y Palestina ha alcanzado en los últimos días su punto álgido tras semanas de creciente hostilidad. La indignación de los palestinos ante las barreras de seguridad colocadas en Jerusalén Este durante el Ramadán y el desalojo de un barrio árabe fueron parte de los detonantes de la ola de violencia.
El pasado lunes, el movimiento Hamás comenzó a disparar cohetes hacia Israel desde la Franja de Gaza, momento a partir del cual las hostilidades escalaron rápidamente, dando lugar a los combates palestino-israelíes más intensos desde la guerra de 50 días de mediados de 2014.
Desde el inicio de las confrontaciones, los ataques israelíes han dañado al menos 18 hospitales y clínicas y destruido un centro de salud en la Franja de Gaza, mientras que casi la mitad de los medicamentos esenciales en el territorio se han agotado.
Como resultado de los bombardeos fallecieron al menos 232 palestinos, incluidos 65 niños, y más de 1.900 resultaron heridos. Entre los israelíes murieron 12 personas, incluidos dos niños, y cientos sufrieron lesiones.
El analista y director de Dossier Geopolítico, Carlos Alberto Pereyra Mele, opina que para mantener la paz en la región es importante que las partes del conflicto cumplan las resoluciones de la ONU.
Cofece multa a Walmart por prácticas monopólicas: la batalla legal apenas comienza
La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) asestó un golpe histórico al multar a Walmart de México con 93.4 millones de pesos tras concluir una investigación que se extendió por más de cuatro años. La razón: prácticas monopólicas relativas, particularmente en el trato con sus distribuidores.
Según el dictamen de la Cofece, Walmart aprovechó su posición dominante en el mercado para imponer condiciones desfavorables a los proveedores, afectando la competencia en el sector. Aunque no se han revelado todos los detalles de las “contribuciones” impuestas a los distribuidores, el veredicto destaca cómo estas prácticas distorsionan el acceso al mercado y perjudican a competidores más pequeños.
En respuesta, Walmart no tardó en reaccionar. La empresa anunció que impugnará la decisión y enfatizó su compromiso con el cumplimiento de las leyes mexicanas. En su comunicación oficial, destacó que la sanción carece de fundamento y que está basada en interpretaciones erróneas. Este movimiento era predecible: para una empresa de este tamaño, 93 millones de pesos no solo representan una cifra considerable, sino también una amenaza a su reputación.
Por otro lado, la Cofece también se juega mucho. Este caso es una muestra clara de su intención de reforzar la vigilancia sobre los gigantes corporativos. Sin embargo, una batalla legal prolongada podría poner a prueba su capacidad de defender sus resoluciones en tribunales.
Más allá de la multa, el caso de Walmart pone el reflector sobre una problemática común en el comercio minorista: el desbalance de poder entre grandes cadenas y pequeños distribuidores. Si bien el desenlace de este litigio aún está por definirse, el mensaje es claro: los días de actuar sin consecuencias podrían estar contados. La industria y los consumidores estarán atentos a cada movimiento en esta batalla judicial.