El papa Francisco ha pedido a sus colaboradores que retomen los planes para una visita a Sudán del Sur, un viaje que había sido descartado en 2017 debido a la guerra civil en el país africano.
Durante una reunión el sábado con el presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, el Santo Padre «ha expresado el deseo de que se verifiquen las condiciones para su posible visita» al país, dijo un comunicado del Vaticano.
Agregó que quería hacer el viaje como signo de cercanía a la población y aliento al proceso de reconciliación y reconstrucción.
Sudán del Sur, un país productor de petróleo que se independizó en 2011, cayó en una guerra civil en diciembre de 2013, cuando una disputa entre Kiir y su despedido vicepresidente Riek Machar desató el conflicto, que suele darse entre etnias.
En septiembre, Kiir -un católico- y Machar -un presbiteriano- firmaron un acuerdo de paz que pide que las principales facciones rivales se reúnan, examinen y entrenen a sus fuerzas para unirlas y convertirlas en el Ejército nacional antes de la creación de un gobierno de unidad en mayo.
Hace tres días, el International Crisis Group, con sede en Bruselas, dijo en un reporte que el acuerdo de paz de seis meses está en riesgo de colapsar debido a que no se ha tomado ninguno de los pasos establecidos en él, a dos meses antes del plazo límite.
Más de la mitad de la población de Sudán del Sur es cristiana, mientras que Sudán es de mayoría musulmana.
En 2017, los líderes de la Iglesia católica en el país dijeron que esperaban que el Papa visite la capital, Yuba, en el otoño boreal de ese año. Los planes fueron desechados debido a preocupaciones sobre seguridad.
l papa Francisco ha pedido a sus colaboradores que retomen los planes para una visita a Sudán del Sur, un viaje que había sido descartado en 2017 debido a la guerra civil en el país africano.
Durante una reunión el sábado con el presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, el Santo Padre «ha expresado el deseo de que se verifiquen las condiciones para su posible visita» al país, dijo un comunicado del Vaticano.
Agregó que quería hacer el viaje como signo de cercanía a la población y aliento al proceso de reconciliación y reconstrucción.
Sudán del Sur, un país productor de petróleo que se independizó en 2011, cayó en una guerra civil en diciembre de 2013, cuando una disputa entre Kiir y su despedido vicepresidente Riek Machar desató el conflicto, que suele darse entre etnias.
En septiembre, Kiir -un católico- y Machar -un presbiteriano- firmaron un acuerdo de paz que pide que las principales facciones rivales se reúnan, examinen y entrenen a sus fuerzas para unirlas y convertirlas en el Ejército nacional antes de la creación de un gobierno de unidad en mayo.
Hace tres días, el International Crisis Group, con sede en Bruselas, dijo en un reporte que el acuerdo de paz de seis meses está en riesgo de colapsar debido a que no se ha tomado ninguno de los pasos establecidos en él, a dos meses antes del plazo límite.
Más de la mitad de la población de Sudán del Sur es cristiana, mientras que Sudán es de mayoría musulmana.
En 2017, los líderes de la Iglesia católica en el país dijeron que esperaban que el Papa visite la capital, Yuba, en el otoño boreal de ese año. Los planes fueron desechados debido a preocupaciones sobre seguridad.
Excelsior