En un hecho considerado como histórico, este martes un juez federal condenó a un militar a 31 años de prisión por el delito de desaparición forzada. En mayo de 2012, el efectivo castrense privó de su libertad a una persona en Los Herreras, Nuevo León; a tres años de la desaparición, aún se desconoce su paradero.
El juez Primero de Distrito en Materia Penal de Nuevo León determinó sentenciar al subteniente de infantería Danny Hernández Sánchez, luego de que la PGR acreditó su responsabilidad penal en la comisión del delito de desaparición forzada.
Luego de analizar las pruebas, el juzgador Eustacio Esteban Salinas Wolberg estimó que quedó plenamente acreditado por la autoridad ministerial que la víctima fue privada ilegalmente de su libertad por parte del hoy sentenciado el 20 de mayo de 2012, en el municipio de Los Herreras, Nuevo León, y hasta el día de hoy no se sabe su paradero.
El impartidor de justicia basó su sentencia en la grave afectación o peligro a los bienes jurídicos tutelados, a saber, la integridad física, la libertad personal y la vida de la víctima directa del delito.
También considerando el ámbito de protección a los familiares, víctimas indirectas del mismo, por el sufrimiento que atraviesan en su afán de lograr información sobre el paradero del aún desaparecido, además de la violación al derecho a la verdad.