La policía reveló hoy que por segundo día consecutivo ha descubierto nuevos restos humanos en una propiedad vinculada con Bruce McArthur, el llamado «jardinero asesino» de Toronto y que está acusado, de momento, de la muerte de ocho personas.
El portavoz policial, el detective Hank Idsinga, encargado de la investigación, declaró que los equipos policiales seguirán excavando en un barranco adyacente a la propiedad utilizada por McArthur para almacenar equipo de jardinería.
Ese barranco era empleado por el sospechoso para descomponer material orgánica que luego empleaba como fertilizante para su negocio de jardinería.
Es en esa propiedad, situada al norte de Toronto, donde la Policía encontró a principios de año partes de cadáveres de siete personas presuntamente asesinadas por McArthur, que está acusado, además, de la muerte de una octava, cuyos restos aún no han sido encontrados.
Las partes de las siete víctimas fueron halladas en el interior de maceteros de grandes dimensiones almacenados en un solar.
Idsinga señaló que todavía no se han identificado los restos humanos localizados en los últimos días, desde que el miércoles los investigadores empezaran a excavar, por lo que no puede decir si son de algunas de las víctimas ya conocidas o de alguna persona todavía no identificada.
«Seguiremos excavando en el mismo área, pero todavía nos queda mucho», afirmó Idsinga.
La Policía de Toronto ha apuntado que está revisando decenas de casos sin resolver de desaparecidos en las últimas décadas para comprobar si tienen alguna relación con McArthur.
McArthur, de 66 años de edad, fue detenido en enero y acusado inicialmente del fallecimiento de dos individuos. Posteriormente, McArthur fue acusado de la muerte de otras seis personas.
Todas las víctimas son varones que frecuentaban el barrio gay de Toronto.
Durante años, la comunidad gay de la ciudad ha denunciado múltiples desapariciones inexplicadas, culpando de ellas a un supuesto asesino en serie.
Hasta enero, la Policía de Toronto negó la existencia de un asesino en serie pero tras la detención de McArthur ha reconocido su error.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.