El gobierno de Guerrero informó que la cifra de viviendas afectadas por las fuertes lluvias y vientos que dejó el huracán Max a su paso por los municipios de la Costa Chica del estado, podría llegar a tres mil.
El gobernador Héctor Astudillo Flores informó que los reportes más recientes indican que más de mil 500 viviendas fueron afectadas por inundaciones, al desbordarse 17 ríos y arroyos, pero estimó que, de acuerdo al censo que aún se realiza, el número se elevaría a tres mil, sólo en municipios de la Costa Chica.
El mandatario estatal se reunió en el municipio de Copala, uno de los más afectados, con alcaldes de los municipios de esta región, donde se presentaron las acciones para ayudar a la población.
En el poblado de Petatlán, en la Costa Grande, se tienen cuantificadas más de 400 viviendas con inundaciones.
Además se informó que este lunes 18 de septiembre no habrá clases en las escuelas de la región de Costa Chica, ni en el municipio de Iliatenco, en la Montaña, debido al recuento y evaluación que se hará en los edificios que sufrieron daños.
La Secretaría de Educación Guerrero, junto con el Instituto Guerrerense de la Infraestructura Física Educativa (IGIFE) y la Secretaría de Protección Civil, harán un recorrido para evaluar todas los planteles de la zona y determinar cuáles deberán mantener la suspensión o reiniciar las clases.
El mandatario estatal dio a conocer que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) restableció la carretera federal Acapulco–Pinotepa Nacional, Oaxaca.
Asimismo, informó que la energía eléctrica se restableció en su mayoría en los municipios de la Costa Chica.
Los daños ocasionados por este fenómeno meteorológico van desde cortes de carreteras, así como en cultivos de maíz y plátano, por lo que los productores recibirán apoyo por parte de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural de Guerrero.