Estados Unidos emitió el lunes una lista de duras exigencias para un nuevo acuerdo nuclear con Irán, y amenazó con “las sanciones más fuertes de la historia” si Teherán no cambia de política.
Tras la decisión del presidente Donald Trump de retirarse del acuerdo nuclear, Estados Unidos debe asegurarse de que Irán nunca pueda desarrollar un arma nuclear, nunca jamás, dijo el secretario de Estado, Mike Pompeo.
Pompeo aseveró que es necesario un nuevo acuerdo para mantener a raya las actividades nucleares de Irán, y amenazó con “presión financiera sin precedentes” para que Teherán regrese a la mesa de negociaciones.
Estas terminarán siendo las sanciones más fuertes de la historia para cuando terminemos”, dijo el funcionario ante la Heritage Foundation, en su discurso más importante desde que asumió el cargo.
La lista que planteó Pompeo contempla 12 requisitos que son muy poco probables que Irán considere.
LOS 12 ‘MANDAMIENTOS’
El secretario de Estado de Estados Unidos dijo que Irán debe detener el enriquecimiento de uranio, lo que fue permitido dentro de las estrictas limitaciones del acuerdo de 2015 firmado durante la presidencia de Barack Obama.
El gobierno iraní también debe permitir el acceso irrestricto a todos los sitios nucleares en todo el país, dijo Pompeo, aludiendo a los sitios militares que quedaron fuera de los límites del acuerdo excepto en circunstancias específicas.
Con ese fin, también dijo que Irán debe declarar todos los esfuerzos previos para construir un arma nuclear, reabriendo un tema que la Agencia Internacional de Energía Atómica ya consideró un asunto cerrado.
Pompeo también exigió que Irán cese una serie de actividades en todo el Medio Oriente que desde hace tiempo han provocado la ira de Estados Unidos y sus aliados.
Agregó que Teherán debe dejar de apoyar a los rebeldes en Yemen, retirar todas las fuerzas de Siria, detener el apoyo al grupo armado libanés Hezbolá y dejar de amenazar a Israel.
Irán también debe liberar a todos los ciudadanos estadunidenses desaparecidos en su territorio o que han sido retenidos bajo “cargos espurios», dijo Pompeo.
Si Irán acomete esos «grandes cambios», algo improbable, Estados Unidos levantaría las sanciones, restauraría las relaciones diplomáticas y ayudaría a Teherán a modernizar su economía.
Pompeo agregó que el Gobierno de Donald Trump «prefiere» que ese potencial acuerdo tome la forma de un «tratado» ratificado por el Congreso de Estados Unidos para garantizar su permanencia, y cerró la puerta a una renegociación del acuerdo nuclear multilateral de 2015.
Sé que nuestros aliados en Europa podrían intentar mantener activo el antiguo acuerdo nuclear con Teherán. Esa es su decisión. Ya saben cuál es nuestra posición», destacó Pompeo.