El embajador de Estados Unidos en México, Ronald Johnson, afirmó que la coordinación en seguridad entre ambos países ha comenzado a rendir frutos, al disminuir el tráfico de fentanilo, armas y migración ilegal.
Mediante un mensaje en redes sociales, Johnson destacó que la presidenta Claudia Sheinbaum y el presidente Donald Trump “impulsan una estrategia conjunta que prioriza la seguridad de nuestros pueblos”. Añadió que cada arma incautada representa una familia más segura y cada gramo de fentanilo detenido puede salvar una vida.
Estas declaraciones se dan tras el reciente acuerdo para evitar, durante 90 días, la imposición de aranceles del 30?% a productos mexicanos. Trump había advertido que impondría dichos aranceles si México no tomaba acciones más contundentes contra el fentanilo.
Washington ha convertido el combate a esta droga sintética en un eje central de su política de seguridad, ya que según los CDC, provocó más de 48 mil muertes por sobredosis en 2024. Autoridades estadounidenses aseguran que el fentanilo se elabora en México con precursores químicos provenientes de China.
En respuesta, México puso en marcha la “Operación Frontera Norte”, con la que afirma haber detenido a 5,996 personas y decomisado casi 54 toneladas de droga, incluidos 310 kilos de fentanilo.
Sheinbaum aseguró que el acuerdo de seguridad con Estados Unidos está “casi listo” y se basa en cuatro principios: respeto a la soberanía, respeto a la territorialidad, confianza mutua y cooperación.
Las tensiones aumentaron tras la fuga de Zhi Dong Zhang, operador chino acusado de contrabandear fentanilo y lavar dinero para cárteles mexicanos. Zhang, bajo arresto domiciliario en México, escapó antes de ser extraditado a Estados Unidos, lo que fue criticado por medios como The Wall Street Journal.
A pesar de ello, ambos gobiernos mantienen el compromiso de reforzar su alianza en seguridad, en un momento clave para la relación bilateral.