La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador no contempló, en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019, recursos para los 5 mil comedores comunitarios puestos en operación por el gobierno de Enrique Peña Nieto como parte de la Cruzada Nacional contra el Hambre.
El programa, que fue impulsado desde el arranque de la pasada administración por la titular de la entonces Secretaría de Desarrollo Social (hoy Bienestar), Rosario Robles, ofrecía alimentos a más de 500 mil personas de escasos recursos.
La Secretaría de Bienestar confirmó que no se contempla que el proyecto continúe el presente año.
Mientras que en 2014 los recursos asignados a los comedores ascendieron a mil 555 millones 500 mil pesos, para 2018 su financiamiento fue de 3 mil 205 millones 757 mil 494 pesos.
El apoyo, que inició operaciones en septiembre de 2013, constituía una solución al problema de hambre en zonas con población de bajos recursos, debido a que niños de cero a 11 años, estudiantes de 12 a 19 años, mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, personas con discapacidad, mayores de 65 años y en situación de vulnerabilidad tenían acceso a alimentación a cambio de una cuota de 10 pesos.
De acuerdo con datos de la otrora Sedesol, cada uno de estos sitios sirvió en promedio 120 comidas diariamente durante el año pasado, lo que significa que a nivel nacional se superaron las 622 mil porciones al día. Además, el servicio contaba con 64 mil voluntarios.
El mayor número de comedores comunitarios se concentra en el Estado de México, con 2 mil, seguido de Guerrero, que suma mil 200; Michoacán, con 500, mientras que Chiapas y Veracruz registran 408 y 352, respectivamente.