Conecta con nosotros

Slider Principal

Exjefe de Interpol recibió 2.1 mdd en sobornos entre 2005 y 2017

El expresidente de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), Meng Hongwei, admitió hoy recibir 14 mil 460 millones de yuanes (2.1 millones de dólares) en sobornos durante los varios cargos públicos que ocupó en China entre 2005 y 2017.

Durante un juicio en el Tribunal Popular Intermedio de Tianjin, norte de China, el también exviceministro de seguridad pública de China admitió haber aceptado grandes sobornos ayudar a las empresas y personas a obtener ganancias ilegales, informó el diario estatal People’s Daily (Diario del Pueblo).

Meng, de 65 años de edad, está acusado de aceptar grandes sobornos y de obtener beneficios a cambio de promociones de trabajo y trato preferencial, cuando fue viceministro de seguridad pública y jefe de la Guardia Costera de China.

En un comunicado, el Tribunal Intermedio No. 1 de Tianjin informó que durante la audiencia de este jueves el exjefe de la Interpol «mostró arrepentimiento», luego de reconocer su culpabilidad y destacó que Meng será sentenciado en un futuro, sin dar una fecha específica.

Junto con su declaración, la Corte publicó una fotografía de Meng durante su comparecencia en la Corte, vestido con una chaqueta color marrón claro, un documento en mano y custodiado por dos oficiales de Policía china.

El juicio se produce tres meses después de que la Comisión Central para la Inspección de Disciplina, centro anticorrupción del Partido Comunista Chino) (PCCh), anunció que Meng estaba bajo investigación gastar «generosas» cantidades de fondos estatales y abusó de su poder.

El exfuncionario, el primer ciudadano chino al frente de la Interpol, fue reportado en octubre pasado por su esposa como desaparecido luego de que viajara a China, aunque después el gobierno confirmó que Meng estaba detenido como parte de una investigación de presuntos actos de corrupción en su contra.

México

Pone ‘El Mayo’ ultimátum: me repatrian o el colapso

Ismael «El Mayo» Zambada, líder de Cártel de Sinaloa, exigió al Gobierno de México que reclame a Estados Unidos su repatriación porque, de no hacerlo, la relación entre los dos países sufrirá un «colapso».

Juan Manuel Delgado González, asesor jurídico de Zambada en México, confirmó que la petición fue presentado ayer en el Consulado General de México en Nueva York un escrito al que tuvo acceso Grupo Reforma y donde Zambada exige que lo defienda el gobierno.

Debe intervenir (el gobierno) a fin de que el presente asunto no resulte en un colapso en la relación bilateral entre ambos países, puesto que no se debe de perder de vista la irregular e ilegal manera en que el suscrito fui puesto a disposición de las autoridades de los Estados Unidos de América».

En julio del 2024, Zambada fue engañado por Joaquín Guzmán López, hijo de «El Chapo» Guzmán, fue secuestrado para llevarlo a Texas donde enfrenta cargos por delincuencia organizada, homicidio, narcotráfico en gran escala y lavado de dinero, entre otros.

En la solicitud de asistencia consular, el capo señala que si no se interviene en favor de sus derechos, políticos y funcionarios mexicanos también pueden ser secuestrados y trasladados ilegalmente al país vecino.

Por lo anterior, expresa que la respuesta del Estado mexicano «no es opcional», porque tiene la obligación ineludible de defenderlo.

«Si el Gobierno de México no actúa, el suscrito seré condenado a pena de muerte sin lugar a ninguna duda y además esto constituirá un precedente peligroso que permitiría que en cualquier momento cualquier gobierno extranjero pudiera de manera impune violentar nuestro territorio y soberanía, interviniendo para la detención de cualquier persona, incluso políticos o funcionarios del Gobierno, para ser trasladados a la jurisdicción norteamericana sin que nada suceda», manifiesta.

«Exijo y demando que el Estado mexicano cumpla con su obligación ineludible de intervenir de manera inmediata, contundente y sin margen de discrecionalidad para exigir formalmente a los Estados Unidos de América garantías y seguridades absolutas, plenas, vinculantes e irrevocables de que no se me impondrá ni se ejecutará la pena de muerte en su jurisdicción. Esta exigencia no es opcional, ni puede ser interpretada como una cuestión de oportunidad política o diplomática».

El documento firmado por Zambada advierte que, de no haber una exigencia categórica y formal de sus garantías, «constituiría una traición al sistema jurídico mexicano» y al deber del Estado de garantizar la seguridad de sus ciudadanos, sin excepción alguna.

«En este contexto, en cuanto hace a mi asunto en particular, resulta una obligación del Estado Mexicano: presentar una protesta formal ante las autoridades estadounidenses, señalando la violación del Tratado (de México y Estados Unidos para prohibir los secuestros transfronterizos) y exigiendo el respeto a la soberanía mexicana y al debido proceso legal», señala.

Solicitar la repatriación inmediata de mi persona, argumentando que mi traslado fue ilegal y que cualquier proceso judicial en mi contra debe llevarse a cabo en México, conforme a las leyes nacionales y los acuerdos internacionales vigentes».

En una parte de su escrito, el líder del Cártel de Sinaloa requiere al Gobierno de México para que pida a los estadounidenses un informe detallado de las circunstancias de su secuestro y traslado, identificando quiénes permitieron su entrada a la Unión Americana y bajo qué base legal.

También, que le informen la identidad de las personas involucradas en su traslado, tanto del lado estadounidense como del lado mexicano.

La razón por la que alega que el Gobierno federal debe exigir la cancelación del proceso al que está sometido en Nueva York, es precisamente porque el procedimiento tiene como origen su secuestro y traslado ilegal a la Unión Americana.

«Esta exigencia no es una cuestión discrecional ni sujeta a consideraciones políticas o diplomáticas», dice.

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto