La Comisión Europea acusó este martes al gigante estadunidense Facebook de proporcionar información falsa o engañosa durante el proceso de investigación para aprobar la compra de WhatsApp en 2014. Antes de que la Comisión aprobase la compra de WhatsApp en octubre de 2014, la empresa de Mark Zuckerberg aseguró que «sería imposible establecer una vinculación automática y confiable» entre la información de las cuentas de los usuarios de ambas redes sociales. Sin embargo, en agosto de este año WhatsApp anunció que sus usuarios podrían vincular sus números de teléfono con sus perfiles de Facebook.
La Comisión argumenta que Facebook y WhatsApp ya tenían el potencial de vincular automáticamente los datos de sus usuarios en 2014 y cree que Facebook incumplió las leyes de la competencia al proporcionar, de forma intencionada o negligente, información falsa o distorsionada durante la investigación. Facebook tiene hasta finales de enero para responder a las acusaciones. La aprobación de la compra de WhatsApp no se verá afectada pero Facebook podría enfrentarse a una multa de hasta uno por ciento de su facturación. En 2015 la facturación de la red social ascendió a unos 18 mil millones de dólares y en los tres primeros trimestes de 2016 sus ventas supusieron 18 mil 800 millones de dólares.
«Siempre pusimos a disposición informaciones correctas sobre nuestras posibilidades técnicas y nuestros planes», dijo hoy un portavoz de Facebook. Y eso se aplicaría tanto a la adquisición en 2014 como a los planes para vincular los datos este año. La compañía está segura de que sus afirmaciones se confirmarán cuando se haga una comprobación detallada. Facebook compró WhatsApp por unos 22 mil millones de dólares hace dos años. Entonces se aseguró que por el momento los datos de ambas redes permanecerían separados y que WhatsApp seguiría siendo independiente.
En la actualidad se sigue asegurando que Facebook no tiene acceso al contenido de los mensajes que se intercambian a través de WhatsApp, entre otras cosas porque estos están encriptados. Facebook afirma que con ayuda de los datos de WhatsApp mejorará la recepción de publicidad y de sugerencias de amistad de sus usuarios.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.