El casi 15 por ciento de la población adulta en México perdió su trabajo o negocio en los últimos doce meses (entre julio de 2020 y julio de 2021) sin poder recuperarlo. Y la expectativa de no poder sufragar los gastos del mes afectó a 43.4 por ciento de estos ciudadanos, y 11.3 por ciento manifestó incertidumbre al respecto.
Así lo reveló la Encuesta Nacional de Bienestar Autorreportado (Enbiare) 2021, elaborada por el Inegi, y agrega que más de un tercio de la población tuvo que pedir prestado para sufragar el gasto corriente de su hogar en cualquiera de los siguientes rubros: despensa, renta o alquiler, agua, luz gas o teléfono, colegiaturas y medicamentos.
El trabajo, presentado en conferencia por el presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), Julio Santaella Castell, subraya que el balance anímico alcanzó un promedio de 5.07 entre la población adulta en México en una escala de menos 10 a mas 10; donde las mujeres muestran en promedio menor balance anímico respecto a los hombres en todos los grupos de edad. La mayor brecha se observa entre hombres y mujeres de 30 a 44 años.
Colima, Sonora y Quintana Roo son las entidades con mejores balances anímicos de su población adulta mientras que en Oaxaca, Puebla y Tabasco presentan menores valoraciones en este indicador.
La proporción de población adulta con síntomas de depresión es de 15.4 por ciento , pero entre las mujeres alcanza 19.5 por ciento. La encuesta 2021 captó que 19.3 por ciento de la población adulta tiene síntomas de ansiedad severa, mientras otro 31.3 por ciento revela síntomas de ansiedad mínima o en algún grado.
Al finalizar la presentación, Santaella Castell pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador definir si continuará en el encargo o será relevado en el Instituto para reducir la incertidumbre.
“Nos gustaría tener una definición que redujera la incertidumbre con la que están sujetas las instituciones. En la medida en que haya más información podemos comenzar a hacer planes para las situaciones que vengan”, comentó.
Para Santaella Castell el cargo como titular del Inegi concluye el próximo 31 de diciembre, tras seis años como presidente, pero se manifiesta dispuesto a continuar. Aunque dijo que tanto él como el Instituto serán respetuosos de la decisión que tome el presidente Andrés Manuel sobre su sustituto o su ratificación.
“De cualquier manera el Inegi y un servidor seremos respetuosos de las decisiones que tome el Ejecutivo federal”. También comentó que el nombramiento de su relevo o su ratificación le traerán mejores variables de bienestar subjetivo y su balance anímico.
“Manteniéndonos dentro del contexto y las variables que maneja el Enbiare lo que puedo comentar es que está aumentando mi ansiedad y disminuye mi bienestar subjetivo y mi balance anímico”, apuntó.