El senador morenista Félix Salgado Macedonio aseguró que Alejandro Moreno Cárdenas, dirigente nacional del PRI y legislador en la Cámara Alta, habría solicitado asilo político en Estados Unidos y en Perú debido a que enfrenta cinco órdenes de aprehensión promovidas por la Fiscalía General de Campeche.
De acuerdo con Salgado, los recientes viajes de “Alito” a Washington y Lima no tuvieron únicamente fines políticos, sino el propósito de encontrar refugio en el extranjero. Recordó que Moreno se reunió primero con la congresista republicana María Elvira Salazar en Estados Unidos y después, en su calidad de presidente de la Copppal, sostuvo un encuentro con la presidenta peruana Dina Boluarte.
El morenista ironizó al señalar que el priista “ya no se presentó al Senado” porque “le salieron alitas”. Incluso sugirió que, tras ser rechazado en Estados Unidos, optó por buscar protección en un país con tensiones diplomáticas con México. “Allá le dijeron ‘no, porque me meterías en un problema diplomático con México, mejor vete a un país donde no haya relaciones diplomáticas’ y por eso llegó a Perú”, declaró.
Sin embargo, desde la bancada priista la respuesta fue inmediata. Manuel Añorve, coordinador del partido en el Senado, calificó de “jalada de los pelos” las acusaciones de Salgado y aseguró que Moreno permanecerá en el país. “Alejandro Moreno va a vivir en México, va a enfrentar lo que tenga que enfrentar. Lo han perseguido, pero les ha ganado todo en la primera acusación, en ese proceso de desafuero que orquestaron”, sostuvo.
Añorve insistió en que los viajes de su dirigente obedecieron a compromisos internacionales derivados de su cargo en la Copppal y no a un intento de eludir la justicia mexicana.
El cruce de acusaciones refleja una nueva disputa política en el Senado en torno a la figura de “Alito” Moreno, quien se mantiene en el centro de la polémica entre la oposición y Morena.