Un gélido aire procedente de Siberia congela este martes a gran parte de Europa, causando una decena de muertos y nieve y frío hasta en incluso en las playas mediterráneas.
Este helado clima contrasta con las condiciones en el propio Ártico, donde se está padeciendo esta semana una inusual «ola de calor», según el Instituto europeo de Geociencias.
Los meteorólogos han documentado temperaturas por encima de cero en algunos lugares del Ártico, lo que ha generado enorme sorpresa entre muchos expertos.
Entretanto, Europa tirita bajo temperaturas por debajo de cero. Esta ola de frio, que los tabloides británicas han apodado «La Bestia del Este», ha causado ya una decena de víctimas mortales en todo el continente.
Al menos cinco personas perecieron el lunes solamente en Polonia, donde el mercurio cayó hasta los -16 grados Celsius durante la noche en Varsovia.
Ello eleva a 53 el número de muertos en Polonia debido al frío desde el 1 de noviembre. Este martes se espera que las temperaturas en este país permanezcan por debajo de los -12 grados Celsius, pero el viento acrecentará esta gélida sensación térmica.
En Lituania, las temperaturas cayeron a -26 grados. Se sospecha que una persona falleció debido al frío en la capital, Vilnius.
En Reino Unido, las autoridades han avisado que habrá entre 5 y 10 centímetros de nieve en varias partes del país, así como la probabilidad de que el transporte aéreo y por carretera se vean afectados, así como los servicios de electricidad y de telefonía.
El lunes, British Airways canceló más de 60 vuelos que debían llegar o partir del aeropuerto londinense de Heathrow.
Debido a la ola de frio y nieve, algunas escuelas fueron cerradas en Italia, que se prepara a celebrar este domingo elecciones legislativas.
En Nápoles, el aeropuerto estaba cerrado el martes por la mañana, y los servicios de autobús suspendidos debido al hielo.
Un conductor de Turín se llevó el susto de su vida cuando una estalactita cayó desde un puente bajo el que pasaba, golpeando su parabrisas, aunque consiguió mantener el control del automóvil.
Uno de los puntos más gélidos del continente se ubicó en Glattalp, en Suiza, donde la temperatura cayó a -38 grados Celsius, algo extremo incluso para la altitud del lugar, mil 850 metros, según la agencia helvética ATS.
En Francia, donde el clima fue muy frio pero seco, los meteorólogos anuncian caídas de nieve en gran parte del país desde este martes, aunque al final de la semana las temperaturas subirán bruscamente, hasta ser casi primaverales.
El martes, residentes de Ajaccio, en la isla francesa de Córcega, despertaron con unos 15 centímetros de nieve en la playa, lo nunca visto desde 1986.
Al menos tres personas han muerto en Francia desde que se iniciara la ola de frío, el domingo.
El alcalde de Etterbeek, en Bélgica, ordenó que quienes pretendan dormir en la calle bajo estas condiciones serán obligados a ser llevados a refugios. El alcalde se ampara en el «elevado riesgo» que supone el frio para la vida de estos sin techo.
En Berlín, la preocupación por la situación de los sin techo condujo a las autoridades a proporcionar 100 camas más en los refugios de la ciudad, que tienen en total mil 200 camas. Más del 90 por ciento de ellas están ocupadas, según la radio pública.