Este medio día, en Chihuahua, Enrique Peña Nieto estuvo en una reunión de evaluación en materia de seguridad con el gobernador César Duarte, miembros del gabinete de seguridad y ciudadanos de la entidad, con la decisión de iniciar de inmediato la construcción de un México en Paz.
Como lo anunció ayer en el Consejo Nacional de Seguridad Pública, el Gobierno de la República ha asumido la responsabilidad de emprender acciones que contribuyan a los objetivos de reducir la violencia y recuperar la paz y tranquilidad de los mexicanos.
La nueva Política de Estado por la Seguridad y Justicia de los Mexicanos busca la disminución de homicidios, secuestros y extorsiones, por ser los delitos que más afectan a la sociedad, tanto en esta entidad como en el resto del territorio mexicano.
Aquí en Chihuahua, iniciará la aplicación el Programa Nacional de Prevención del Delito. Se trata de un programa transversal de prevención que alineará las políticas para combatir adicciones, rescatar espacios públicos, establecer más Escuelas de Tiempo Completo, fomentar el empleo de jóvenes y promover proyectos productivos.
Chihuahua, todos los sabemos, ha sido fuertemente golpeada por la delincuencia. El Gobierno de la República respaldará firmemente a Chihuahua. «Autoridades y ciudadanos trabajaremos unidos en torno a una gran causa: que Chihuahua y que todo México, recuperen la Paz y la Tranquilidad.», concluyó el presidente en el Palacio de Gobierno de Chihuahua.
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