Hallan en Colombia, el cuerpo de un bebé de cuatro meses, quien fue enterrado vivo en el municipio de Segovia, departamento de Antioquia; la víctima murió por asfixia.
El presunto responsable de haber enterrado al menor Ismael Espitia, es un hombre de 21 años, identificado como Yony Alexánder Meneses, mismo que aceptó haber sepultado vivo al bebé, sin dar explicaciones; fue detenido por la Fiscalía de dicho país, informó el portal Sin Embargo.
«Los hechos investigados ocurrieron a las 3 de la tarde de este domingo 28 de enero, cuando el hoy procesado le pidió a su hermana de 17 años que fuera a la tienda a comprarle algo para comer. La menor accedió y le dejó al niño que tenía bajo su cuidado por petición de unos vecinos», detalló la Fiscalía en un comunicado.
Al regresar, la joven no encontró al niño, por lo que alertó a la comunidad e iniciaron su búsqueda. Por la tarde del domingo, el cadáver del bebé fue encontrado en una cantera de arena.
Según el director del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Colombia, Carlos Valdés: «La causa de la muerte corresponde a una asfixia mecánica por sofocación. Significa que se reemplaza el aire aspirado por tierra».
Ayer, el Juzgado Promiscuo Municipal de Segovia impuso medida de aseguramiento al presunto asesino, quien no aceptó los cargos de homicidio culposo y secuestro impuestos por el ente acusador, informó el medio antes citado.