El día lunes 10 de enero de 2022, la Fiscalía Puebla recibió información de personal del Centro Penitenciario de Puebla acerca del hallazgo del cuerpo sin vida de un bebé de aproximadamente tres meses. A partir de ahí, la investigación se planeó en dos grandes vertientes: conocer la identidad y origen del cuerpo sin vida del menor de edad, además de quién y cómo introdujo el cuerpo del menor al Centro Penitenciario.
Se entrevistaron a decenas de servidores públicos del centro referido, tales como custodios, Jefes de Turno, Comandantes, Subdirector, Director y al Subsecretario del ramo, así como a personas privadas de la libertad que se encuentran internadas en ese lugar. También se analizaron los videos del Centro Penitenciario y las bitácoras.
En esta vertiente, cabe mencionar que ya se ha identificado a la persona que depositó el cuerpo del menor en el contenedor de basura del Centro Penitenciario”, se refirió.
“En breve determinaremos las responsabilidades que en materia penal puedan atribuirse a quienes transportaron el cuerpo del menor en territorio del Estado de Puebla, lo introdujeron al Centro Penitenciario, del trato que le hubieren dado al cuerpo y de quien lo depositó en el contenedor de basura”, se lee en el comunicado.
Durante el curso de la investigación, se tuvo conocimiento a través de las redes sociales de que una persona que mencionaba la posible relación entre la exhumación del cuerpo de un bebé, identificado como Tadeo, en un cementerio ubicado en Iztapalapa, Ciudad de México, y el cuerpo localizado en el Centro Penitenciario de Puebla.
Personal investigador se comunicó con dicha persona y se le orientó para que los padres del menor inhumado en la Ciudad de México se presentaran ante la Fiscalía de Puebla para realizar las diligencias y peritaciones pertinentes y determinar si se trataba del mismo cuerpo.
Se entrevistaron a la madre y padre del menor referido, además se revisaron documentos relativos a la atención médica, muerte e inhumación del cuerpo, incluso se tomaron muestras biológicas para realizar el examen pericial genético.
El resultado obtenido de la prueba genética el día de hoy, es que existe correspondencia entre el cuerpo del menor hallado en el contenedor de basura del Centro Penitenciario de Puebla y el de las dos personas entrevistadas, es decir, los que se ostentaron como padre y madre. Esto es, el menor inhumado y luego exhumado en la Ciudad de México es el mismo que fue encontrado en el Centro Penitenciario de Puebla”, se lee en el comunicado.
De la necropsia realizada al cuerpo del menor de edad encontrado en el Centro de reclusión poblano, se advirtió que conservaba todos sus órganos en su lugar y que presentaba una herida quirúrgica de 7 centímetros con sus puntos de sutura originales. Información que fue confirmada por los padres del menor referido.
A partir de la certeza pericial de que el cuerpo hallado en el Centro Penitenciario de Puebla es el que fue exhumado de un cementerio de la Ciudad de México, estableceremos la coordinación efectiva con la Fiscalía de aquél lugar, para que actúe conforme a su competencia por los hechos registrados en aquella ciudad”, finalizó el comunicado.
El caso ha sacudido a México desde la semana pasada, cuando la asociación civil Reinserta denunció el hallazgo del bebé en el penal. Según explicó la ONG, un interno que trabajaba en los contenedores de material de plástico reciclable, conocido como PET, encontró el cuerpo del bebé cubierto con cal y dentro de una bolsa.
El hecho también ha levantado polémica porque la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) se negó a investigar el caso, mientras que el gobernador de Puebla, el oficialista Miguel Barbosa, advirtió a periodistas y activistas de que “tengan cuidado” al indagar la historia.