Este martes iniciaron las actividades programadas en la 7ª Semana Nacional del Enfermo Alcohólico Encamado, que organiza el área Chihuahua Centro de Alcohólicos Anónimos, la cual se llevará a cabo hasta el 16 de octubre.
La Delegación Estatal del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Chihuahua está coadyuvando en la realización de los foros y talleres que AA llevará a cabo en las salas de espera de las diferentes Unidades de Medicina Familiar (UMF), en donde se difundirá el mensaje que esta organización tiene para la atención y apoyo a quienes padecen esta enfermedad.
En la entidad, el arranque de las actividades de esta 7ª Semana Nacional del Enfermo Alcohólico Encamado se llevó a cabo en esta ciudad capital, en las instalaciones del Centro de Seguridad Social (CSS), mejor conocido como La Casa de la Asegurada.
Este evento estuvo presidido por representantes del área Chihuahua Centro de AA, del Sector Salud, así como de la Delegación Estatal del IMSS, a través de la Jefatura de Prestaciones Médicas, de la Coordinación de Proyectos Especiales, y de Prestaciones Económicas y Sociales.
En esta ceremonia se destacó el interés que tiene el Seguro Social en participar en este tipo de acciones, consideradas necesarias para incidir de manera positiva en la atención de la enfermedad del alcoholismo.
Se refirió además que este evento se instruyó y formalizó en abril del 2009 en el marco de la XLIII Conferencia Mexicana, con la finalidad de fortalecer lazos de colaboración con las distintas instituciones de carácter médico, gubernamental y paraestatal del país, para llevar el mensaje de Alcohólicos Anónimos a los enfermos alcohólicos encamados.
Asimismo, se destacó que existe una relación importante del consumo de alcohol con trastornos mentales, enfermedades no trasmisibles, cirrosis hepática, enfermedades cardiovasculares e infecciosas, como la tuberculosis y traumatismos por accidentes automovilísticos y lesiones por arma de fuego.
Igualmente, se hizo hincapié en que más allá de las consecuencias sanitarias, el consumo nocivo del alcohol provoca pérdidas sociales y económicas importantes, tanto para las personas como para la sociedad en su conjunto.