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Resto del mundo

Joe Biden llega con “Major”, será el primer perro rescatado en la Casa Blanca

Una vez que se ha declarado la victoria del candidato demócrata Joe Biden, él y su familia serán los nuevos huéspedes de la Casa Blanca desde enero del 2020. Esto incluye a sus dos mascotas: Champ y Major.

Champ lleva en la familia desde 2008, cuando el binomio Obama-Biden ganó las elecciones. En esa época, el presidente Obama les había prometido a sus hijas Malia y Sasha que si ganaba la presidencia podrían tener un cachorro y Joe Biden le hizo la misma promesa a su esposa. Desde entonces es uno de los protagonistas frecuentes de las fotografías e historias en redes sociales de los Biden.

En un inicio recibió muchas críticas por haber comprado al perro de un criador. Pero en 2018 la familia decidió adoptar un segundo can para completar su familia.

Su hija Ashley le envió una foto de Major, que estaba a cargo de la Delaware Humane Association, quienes dieron la noticia de su adopción en redes sociales. Esta es la primera vez en la historia que un perro rescatado vive en la casa más famosa de Washington, en el 1600 de Pennsylvania Avenue.

Será la primera vez en cuatro años que la Casa Blanca vuelva a tener perros en sus jardines, después de que la familia Trump no tuviera ninguna mascota en casa. En redes ya se les ha dado el título de DOTUS (Primeros Perros de los Estados Unidos, por sus siglas en inglés).

La tradición empezó con George Washington, el primer presidente de los Estados Unidos. Antes de la familia Trump, los Obama tuvieron la compañía de sus dos perros

México

Sheinbaum responde a fiscal de EE.UU.: “Pam Bondi no está informada; México no es un adversario extranjero”

Ciudad de México.— La presidenta Claudia Sheinbaum rechazó este jueves las declaraciones de la fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, quien colocó a México en la lista de “adversarios extranjeros” junto a Irán, Rusia y China, al considerar que el país permite operar impunemente a los cárteles del narcotráfico, facilitando el tráfico de fentanilo hacia territorio estadounidense.

“No tiene sustento lo que dijo la secretaria del Departamento de Justicia. No está informada”, señaló la mandataria durante su conferencia matutina, en una respuesta directa a las declaraciones de Bondi emitidas un día antes en el Comité de Apropiaciones del Senado estadounidense, donde defendió el presupuesto 2026 del gobierno de Donald Trump.

En esa audiencia, Bondi sostuvo que Estados Unidos “no se dejará intimidar” y que tomará medidas firmes contra cualquier nación que represente un riesgo a su seguridad, incluyendo a México, al que acusó de ser “gobernado por los cárteles del narcotráfico” y de permitir que organizaciones criminales como el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación introduzcan fentanilo al país.

Sheinbaum refutó esta postura, asegurando que existe una coordinación constante con Washington en materia de seguridad, sin que ello implique subordinación. “La estrategia está funcionando. Hay problemas, sí, pero hay avances reales”, enfatizó. Afirmó que en los últimos meses se ha reducido el flujo de fentanilo hacia el norte, así como la incidencia de homicidios en el país, situación reconocida incluso por agencias estadounidenses de aduanas y migración.

La mandataria también recordó que ambas naciones están por firmar un nuevo acuerdo bilateral de seguridad y que desde febrero se ha reforzado la vigilancia fronteriza a través de la «Operación Frontera Norte», la cual permitió —según datos oficiales— la detención de 4 mil 619 personas y la incautación de más de 40 toneladas de droga, incluyendo 1.14 millones de pastillas de fentanilo.

Las declaraciones de Bondi se producen en un contexto político delicado, donde la administración Trump ha endurecido su discurso en torno al fentanilo, atribuyendo su proliferación a la colaboración entre grupos criminales mexicanos y proveedores químicos chinos. Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), esta droga causó más de 48 mil muertes por sobredosis en EE.UU. durante 2024.

Sheinbaum insistió en que, pese a las diferencias políticas, la relación con Washington debe basarse en cooperación mutua, datos verificables y respeto. “México no puede ni debe ser equiparado con regímenes autoritarios o enemigos de Estados Unidos. Estamos comprometidos con el combate al crimen, pero también con la soberanía y la verdad”, concluyó.

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