Dos cajetillas de cigarro consumía a diario el actor Jorge Ortiz de Pinedo, adicción que, aseguró, lo enfermó de cáncer en el pulmón.
Sin embargo, hoy grita de alegría luego que tras haberle extirpado un tumor y someterse a varios meses de tratamiento, el mal le fue erradicado.
“Vencer al cáncer es un milagro más en mi vida. Es una enfermedad con la que tienes que luchar, pero se puede ganar y eso es lo más importante. De ahora en adelante también celebraré el 4 de julio como mi cumpleaños, además del 26 de marzo”, afirmó el actor y productor.
Recordó que esta experiencia comenzó cuando notó que su cuerpo estaba perdiendo peso en poco tiempo y sabía que no era una conducta normal.
“De repente perdí cinco kilos en 15 o 20 días y supe que algo estaba mal. Me realizaron estudios y el diagnóstico fue anemia, pero había que averiguar la causa, entonces me hicieron otra valoración para finalizar en una tomografía que mostró un tumor en el pulmón izquierdo, detrás del corazón”.
El médico oncólogo que lo atendió le explicó que debían analizar si la protuberancia contenía signos de malignidad. Si las sospechas eran positivas había que realizar otros estudios para descartar que fuera metástasis, es decir, que el cáncer no estuviera regado a otros órganos del cuerpo.
“Me hicieron otras pruebas en la Universidad y se confirmó que el cáncer vivía sólo en ese sitio y que estaba en etapa 1, la más baja. A los dos días me operaron, para quitarme medio pulmón y lo maravilloso es que la pleura se ha regenerado gracias al ejercicio que hago”, resaltó.
Aunque padecer cáncer le preocupó, el comediante aseguró que jamás pasó por su mente la muerte, “simplemente pensé en la manera que podían quitármelo para seguir con mi vida”.
“En ese momento, se me vinieron a la mente mi gente, mis hijos, mis amigos, mi trabajo y mis 40 empleados. Así que dije: “no me puedo ir, tengo cosas que hacer. Cuando sea el momento y mi cuerpo me lo pida, lo haré, pero ahorita no”.
Platicó que cuando le dieron la noticia del cáncer prefirió no comunicarlo de inmediato a su familia, salvo a su hija Gabriela que lo acompañaba en ese momento.
“Me guardé los motivos de mi baja de peso durante cuatro días y cuando ya me iban a operar, le pedí permiso al doctor para organizar una comida en mi casa con todos mis seres queridos, pero el mero día de la cirugía planeada a las 12 del día, les conté la verdad”.
Luego de la operación, a Ortiz de Pinedo le aplicaron cuatro quimioterapias sólo por precaución. Ahora el artista agradece al público sus oraciones y su preocupación por su estado de salud.
Informó que el próximo 10 de octubre reaparecerá para celebrar las 100 representaciones de la obra de teatro «Las obras completas de William Shakespeare (Abreviadas)», de la que es productor junto con su hijo Pedro.
La placa conmemorativa será develada por Eugenio Derbez y Alessandra Rosaldo en el teatro Ignacio López Tarso del Centro Cultural San Ángel.
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