Durante el segundo informe de gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador, volvió a destacar las labores que han llevado a cabo en el combate a la corrupción, el cual es un elemento fundamental para su administración, pues es uno de los principales problemas del país. “La peste de la corrupción originó la crisis de México”, comentó.
Desde el patio central de Palacio Nacional, el mandatario puntualizó que el principal legado de su gobierno será “purificar la vida pública de México”, además de que “no será recordado por corrupto”. Incluso dijo que “estos momentos, más que en otros, transformar es moralizar”.
López Obrador también detalló que en la actualidad no se han emprendido “persecusiones facciosas ni venganzas políticas”, además de que uno sus pilares morales se basa en no encubrir a nadie, algo que ha reiterado en diversas ocasiones, además de que no se permite la impunidad.
“Ya se acabó la robadera de los de arriba, pero todavía falta desterrar por completo el bandidaje oficial”, explicó para después mencionar que la austeridad republicana que implementó desde el inicio de su administración ha funcionado para cubrir otros aspectos económicos que se han visto afectados durante la pandemia de COVID-19.
Detalló que durante los dos años de gobierno que lleva al frente del país, se han ahorrado “alrededor de 560,00 millones de pesos. No es para presumir, pero en el peor momento, contamos con el mejor gobierno”, destacó López Obrador, quien también refirió las dos crisis que vive el país: una sanitaria y otra económica, de las cuales “vamos saliendo adelante”.
Si bien el presidente resaltó su participación en el combate a la corrupción, en los últimos meses se ha visto envuelto en la polémica por diversos casos. El más reciente fue el video en el que aparece su hermano Pío López Obrador, recibiendo paquetes de dinero de parte de David León, hasta hace poco coordinador nacional de Protección Civil.
Como respuesta, el mandatario negó que se tratara de un escándalo de corrupción, pues los billetes que aparecían en la grabación eran aportaciones del pueblo para financiar su movimiento en Chiapas.
Otros casos que también han sido criticados por una parte de la opinión pública son el de los ventiladores que el hijo de Manuel Bartlett le vendió a sobreprecio al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Asimismo, otro asunto que dio de qué hablar fue el de las casas de Bartlett, actual director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), las cuales no parecían corresponder con sus ingresos.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.