Ayman al Zawahiri, quien asumió el liderazgo de Al Qaeda después de la muerte de Osama Bin Laden, hizo un llamado a todos sus seguidores para que ejecuten una serie de ataques, a pequeña escala, en el interior de Estados Unidos, para así obligar al gobierno norteamericano a incrementar su gasto en seguridad.
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Al Zawahiri comentó que desea que esta ola de ataques culmine en un atentado aún más importante en la nación estadounidense.
«Deberíamos desangrar a América económicamente, provocar que sigan realizando este gasto masivo de seguridad. El punto débil de América es su economía, que ya ha comenzado a tambalearse precisamente por sus gastos militares y de protección», dijo el líder extremista en un mensaje de audio.
Este mensaje sale a relucir a unos días de que se celebrara el aniversario número 12 de los ataques del 11 de septiembre.
Al Zawahiri comentó que «sólo hace falta que uno o varios hermanos ataques en un par de sitios; ataque con disparos que lleven a la guerra a su propio terreno, para que los musulmanes aprovechen cualquier oportunidad que se presente para perpetrar un gran ataque en Estados Unidos», según la grabación difundida.
Algunos líderes occidentales del combate al terrorismo han advertido que la presencia de «lobos solitarios» radicalizados -personas que planean ataques por sí solos y que podrían tener contacto con Al Qaeda, significan un gran riesgo para la seguridad de Estados Unidos, según Reuters.
«Si bien nosotros estamos venciendo en la guerra de guerrillas en Somalia, Yemen, Irak y Afganistán debemos seguir con la guerra (…) en su propia tierra», dijo Al Zawahiri.