Los golpeadores que impidieron que se llevara a cabo el mitin de la precandidata a jefa de Gobierno por Morena, Claudia Sheinbaum la semana pasada en Coyoacán, afirmaron que son apolíticos y trabajan por dinero, sin embargo, quien los contrató les adeuda 86 mil pesos.
Los tres líderes de los golpeadores están a la zozobra por la falta de pago, incluso dos de ellos, Lorenzo Montiel Ramos y Luis Alberto Montiel Andrade, iniciaron una carpeta de hechos ante la Procuraduría de Justicia de Ciudad de México.
De acuerdo con la carpeta de hechos con el número CI-FCY/COY-5/3C/D/21/01-18, de la que Milenio tiene copia, los dos líderes revelaron que fueron contratados por Gerardo Villanueva y Carlos Castillo por instrucciones de Martí Batres, para irrumpir en el evento de Sheinbaum, el pasado 3 de enero en Coyoacán. El pacto lo hicieron en Xoloc 81, colonia Ruiz Cortines, Coyoacán, afirmaron.
Los dos sujetos de apellido Montiel, aseguraron que no temen ser sometidos a juicio penal, sino de no pagarles los 3 mil pesos que les prometieron a las 22 personas que participaron en la trifulca.
«Ahorita estamos en problemas muy graves, porque no se vale que te ocupen y no paguen. Nos prometieron algo y a la fecha ya no contestan, ahora nos desconocen, y estamos en medio de una situación grave, la gente que llevamos de eso vive y ahora nos están cobrando todo por ir de ‘borregas’, comentó Lorenzo Montiel Ramos a periodistas del diario Milenio.
Para impedir el mitin de la precandidata de Morena, sólo recibieron 10 mil pesos de adelanto, cuando les prometieron esa cantidad para cada líder y 3 mil para cada una de las 22 personas que contrataron, relataron los Montiel.
«Nada más nos ocuparon y estamos con la zozobra de no saber qué hacer, en lo judicial lo que tenga que proceder se hará, lo único que queremos es que nos hagan real el pago, porque no vamos a pagar sin el dinero prometido, nosotros fuimos a pelear algo solicitado» indicó Luis Alberto Montiel Andrade.
A una semana de que realizaron el trabajo, los líderes aseguran que la gente de Morena no atiende sus llamadas y temen por su integridad, por lo que decidieron levantar la denuncia ante la procuraduría capitalina.
Por su parte, Guerardo Villanueva, consejero estatal de Morena, en entrevista con Milenio calificó la denuncia como «inverosímil, descabellada, ridícula, muy temeraria, una patada de ahogado y completamente falsos».
Explicó: «Para empezar, ni dinero tengo, y en segundo, por qué haría yo una situación de esta naturaleza cuando en los propios mítines está mi familia y compañeros de Morena; por ello es completamente insostenible dicha acusación».