Israel Arzate fue acusado de ser uno de los responsables de la masacre de 17 jóvenes en Ciudad Juárez en 2010. Este miércoles, más de tres años después de su detención, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ordenó su liberación por la corrupción durante su confesión ante militares que lo detuvieron y torturaron.
Ahora, su madre, Guadalupe Meléndez, quiere que Israel demande a quienes lo acusaron.
«Le he dicho que vaya hasta las últimas consecuencias para que tomen conciencia las personas y no lo vuelvan a hacer, en Chihuahua y en toda la República Mexicana hay autoridades que fabrican testigos, pruebas, inclusive hasta les pagan a personas y como hay mucha necesidad por el hambre, la gente acepta vender su conciencia», dijo Meléndez durante una entrevista.
«No creo que es justo arruinar la vida del joven de la familia acusándolo de algo que no cometió».
El 30 de enero de 2010, un grupo de hombres armados mató a 17 jóvenes que estaban en una fiesta en la comunidad de Villas de Salvárcar en Ciudad Juárez, Chihuahua. Según el Centro ProDH, Arzate fue detenido el 3 de febrero, pero no fue presentado inmediatamente ante el Ministerio Público y un funcionario de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) reportó que el arresto fue el 4 de febrero. Dos días después, tras ser torturado, Arzate se declaró culpable.
Otras organizaciones como la ONU, a través del alto comisionado de Derechos Humanos, Amnistía Internacional, Human Rights Watch y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) habían pedido la liberación de Arzate por las fallas en el proceso.
El abogado del joven, quien habló tras el fallo de la Primera Sala de la SCJN, coincidió: «Israel es inocente, nosotros no tenemos niguna duda al respecto, desde el primer momento estuvieron las pruebas de que él se encontraba en otro lugar cuando sucedieron los hechos».
You must be logged in to post a comment Login