Hartos, estamos hartos de escribir de lo mismo, pero siguen las secuelas de la arrollada que le dio el PRI al PAN en las pasadas elecciones, y quien parece sufrir más secuelas de estrés postraumático es Mario Mata, ex alcalde de Delicias, quien acusa de plagio, traición y complot a sus compañeros, en especial al alcalde actual de Delicias, Jaime Beltrán del Río.
La frustración de Mata es comprensible. Durante un par de años fue prácticamente el primer panista del estado, el único con una modesta victoria tras el aplastante triunfo del PRI, y sentía que eso le daría suficiente empuje para buscar la gubernatura, pero no fue así.
Mata, como buen panista, ha sido reacio a la autocrítica. Quiere pasar la papa caliente de su derrota a alguien, pero la verdad es que Tony Meléndez hizo mejor campaña y traía el empuje del priísmo más o menos unido. El intérprete de Primavera ofrecerá un concierto gratis para sus electores como agradecimiento.
Pero no todas las decisiones de Mata han sido desafortunadas, pues forma parte del grupo de panistas que se sumó al proyecto de Ricardo Anaya, al igual que la diputada Rocío Reza, el ex dirigente municipal Miguel La Torre, la diputada Ana Lilia Gómez, entre otros panistas que se salvaron del naufragio.
Esto forma parte de la jugada que se aventó Gustavo Madero para apañarse la dirigencia de su bancada, con lo cual se robustece pues será interlocutor en grandes ligas y todos los panistas, sobre todo gobernadores y alcaldes, tendrán que hacer de tripas corazón y llevarse bien con él pues en sus manos está la gestión de recursos para territorios panistas.
Pero volviendo al tema de los suspirantes por la gubernatura, Mata ha asegurado que seguirá buscándola, aunque no tenga nada qué hacer en el terreno ante un Juan Blanco brioso por haber resultado el único sobreviviente de la masacre que el PRI realizó con sus adversarios políticos… y que aún no acaba.
Otro que tiene sueños altos dentro del PAN es Javier Corral, quien quiere volver a figurar en los pendones sobre la leyenda ‘candidato a gobernador’, aunque se ve difícil por el limitado éxito que ha tenido su convocatoria de Unión Ciudadana, que como siempre es bien vista por algunos activistas ‘nice’ y no tan ‘nice’, pero sigue sin poder conectar con ‘la raza’. El eterno lastre de Javier.
En el PRI el candidato se ve claro, es Enrique Serrano, primer apapachado de la actual administración, aunque no va solo. Le siguen Graciela Ortíz, una hábil e institucional senadora, así como José Salcido, presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado. No podemos dejar de mencionar a Marco Adán Quezada y Héctor ‘Teto’ Murguía, quienes tratan de coletear y remontar el río con toda la corriente en contra.
Pero ya que mencionamos al presidente del STJE, miren cómo le anda haciendo este señor que está metiendo las manos hasta los hombros en el proceso de selección del Organismo Operador Local Electoral, que dependerá directamente del supremo y podría quedar bajo la batuta de Fernando Herrera, quien lleva años prendido de la ubre pública y no está dispuesto a soltarla.
La que tiene sobrados motivos para traer el ego alto es la presidenta del PRI, Karina Velázquez, quien entregó buenos resultados a pesar de haber ocupado el cargo como interina tras suplir a Alejandro Domínguez, quien a su vez había suplido a Alejandro De la Rosa.
Pero mire cómo será la raza de malpensada, que no pueden ver a una política con un galán de balneario como David Zepeda porque ya quieren llevar fantasías telenovelescas a la vida real y ya hasta romances andan queriendo achacar o, cuando menos, mucha cercanía entre la dirigente y el bailarín, quien dicen se aventó un strip tease y hasta unos ‘privados’.
Pero ya que andan todos celebrando la victoria, podrían hacerlo juntos pues, a pesar de haber recibido los votos de apenas el 10% del electorado, los priístas no tienen tiempo para pensar en los motivos del extremo abstencionismo que se vivió en Chihuahua pues están preparando un megapachangón que podría realizarse en la X de Ciudad Juárez, donde acudirían los ocho ganadores y hasta la perdedora Liz Aguilera.
Otro priísta que anda muy contento es el alcalde Javier Garfio, no sólo porque le han llovido felicitaciones tras su decisión de abrir las puertas del estacionamiento de Plaza del Sol y prohibir los cobros, sino porque se la pasará en las chilangas tierras organizando la reunión de la Federación Nacional de Municipios de México en la capital del estado.
Como mamá de quinceañera, anda al pendiente de todos los preparativos y hasta dejó encargado el changarro para que quede de lujo este evento que pretende dar prestigio a Chihuahua y, por supuesto, a quien lo gobierna.
Garfio ha aprendido en caballo ajeno que un descuido puede arruinarlo, y es por eso que tiene especial cuidado con detalles que descuidaron anteriores administraciones, tanto que ha separado estrictamente los asuntos públicos de los políticos y se ha concentrado en ofrecer resultados como alcalde, con una buena administración.
Sin embargo su lejanía de la grilla le está pasando factura, pues está recibiendo nutrido ‘fuego amigo’ de quienes sueñan con verlo despeinado para soltar memes en redes sociales ¿reaccionará el edil? Seguramente sí, pronto.
Para terminar con la lista de agasajados, está el cónsul norteamericano, Ian Brownlee, quien firmó en Chihuahua un Memorando de Entendimiento entre la Universidad Autónoma de Chihuahua y la Agencia de Estados Unidos para el desarrollo de las Naciones.
Duarte no perdió la oportunidad de estrechar la cercanía con este personaje y reconoció su participación en la guerra contra el narco, no por las miles de armas estadounidenses que importaron los cárteles mexicanos como parte del programa Rápido y Furioso, sino por su apoyo en gestiones ante las autoridades gringas, y ya arrancaron operativos conjuntos entre fuerzas mexicanas y americanas a ambos lados de la frontera.