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Mata a empleado de Burger King porque la comida tardaba

Un empleado de un Burger King en Florida ha muerto tras una disputa con uno de los clientes. Según han informado los medios locales, una mujer que estaba molesta porque su pedido tardaba demasiado hizo que «su hombre» viniera al restaurante y disparara al trabajador. El fallecido tenía 22 años y había empezado a trabajar en el local de comida rápida tan solo unos días antes.

Desmond Armond Joshua murió en el hospital al que fue llevado de urgencia después del disparo recibido el sábado 1 de agosto en el condado Orange, en el centro de Florida, según la oficina del alguacil de la zona. Esa noche el local estaba muy concurrido y los clientes debieron esperar más de lo habitual para recibir sus pedidos, según relatan los medios locales.

Una mujer que aguardaba su comida comenzó a enfadarse y a gritar y llegó a amenazar con que iba a llamar a «su hombre» para que arreglara la situación. El personal la vio tan alterada que le entregó a la mujer un reembolso de 40 dólares y le pidió que se fuera. Así lo hizo, pero regresó al poco tiempo con el agresor, identificado luego como Kelvis Rodríguez-Tormes, de 37 años. La mujer, cuya identidad no ha sido difundida, desafió a Joshua a que peleara con él.

Las cámaras de seguridad del restaurante captaron cómo Rodríguez-Tormes agarró al empleado por la cabeza y trató de asfixiarlo hasta que una persona que estaba allí logró que lo soltara. Rodríguez-Tormes abandonó el restaurante pero fue a su vehículo, tomó una pistola y regresó. Antes de abrir fuego le advirtió: «tienes dos segundos antes de que te dispare».

El hispano fue detenido y acusado de homicidio en primer grado con un arma de fuego, destrucción de evidencia (el arma no ha aparecido) y posesión de arma de fuego por una persona con una condena penal previa.

EFE

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Explota cohete Starship en Texas: nuevo revés para SpaceX a solo un año de su misión a Marte

Una nueva explosión sacudió la noche del miércoles 18 de junio el cielo del sur de Texas, cuando el cohete Starship de SpaceX estalló durante pruebas en la base de lanzamiento de Brownsville, en lo que la compañía calificó como “una anomalía mayor”. La gigantesca nave de 400 pies de altura —pilar del ambicioso plan de Elon Musk para colonizar Marte— sufrió un fallo durante su test en tierra, generando una enorme bola de fuego y escombros visibles desde varios kilómetros a la redonda.

Aunque no se reportaron heridos, SpaceX pidió a la población mantenerse alejada de la zona mientras equipos de seguridad trabajan para asegurar las instalaciones de Starbase y sus alrededores. “No existen riesgos para las comunidades cercanas”, aseguró la empresa en un comunicado publicado en su cuenta de X.

La causa de la explosión aún está bajo investigación, pero Elon Musk adelantó en redes sociales que los datos preliminares apuntan al fallo de un contenedor presurizado de nitrógeno (COPV, por sus siglas en inglés) en la bahía de carga. “Si se confirma, sería la primera vez que este diseño falla de esa manera”, añadió el fundador de SpaceX.

El incidente se suma a una serie de contratiempos recientes para el programa Starship. Apenas el 27 de mayo, durante su noveno vuelo de prueba, la nave se desintegró sobre el océano Índico tras perder el control 46 minutos después del despegue. En enero y marzo también se registraron explosiones durante vuelos de ensayo, con espectaculares desintegraciones en el cielo de Florida y el Caribe. En esas ocasiones, la etapa superior —donde viajarían astronautas y carga en futuras misiones— logró separarse, pero falló en completar su trayecto.

El Starship está diseñado como un sistema de transporte completamente reutilizable, capaz de regresar a la Tierra después de cada misión. Su objetivo final: llevar humanos y suministros al espacio profundo, con un enfoque particular en Marte. Musk ha reiterado que espera lanzar una misión no tripulada al planeta rojo en 2026, como parte del calendario para establecer presencia humana permanente fuera de la Tierra.

A pesar de los reveses, entre junio y noviembre de 2024, tres pruebas exitosas lograron que Starship orbitara la mitad del planeta y aterrizara sin contratiempos en el océano Índico, generando expectativas positivas. No obstante, los recientes fallos han encendido alarmas sobre la confiabilidad del sistema a tan solo un año de la fecha fijada para iniciar su misión interplanetaria.

Las imágenes captadas por testigos y difundidas el jueves muestran al prototipo Starship 36 envuelto en llamas tras sufrir al menos dos explosiones consecutivas durante la prueba estática, que se realizaba horas después de que la compañía compartiera un video celebrando la activación de uno de sus motores en simulación de ignición en el espacio.

SpaceX no ha anunciado si este nuevo revés alterará su calendario de lanzamientos, pero el incidente representa otro desafío técnico —y mediático— para una empresa que apuesta su prestigio al futuro de la exploración espacial. Mientras tanto, el sueño de colonizar Marte se mantiene en pie, aunque bajo la sombra de explosiones que, una y otra vez, recuerdan que alcanzar el cosmos sigue siendo una tarea plagada de riesgos.

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