El mexicano fue secuestrado junto a su novia Shani Louk, quien fue asesinada por Hamás.
Ciudad de México.- El Gobierno de México hizo ayer martes un llamado «urgente» a liberar rehenes en la Franja de Gaza, a más de 100 días de iniciado el conflicto.
Según cifras, Hamás capturó aquel día a 240 cientos de personas, de las que alrededor de 130 permanecen secuestradas, entre ellas un ciudadano mexicano.
«México hace un llamado urgente a las autoridades y actores involucrados en la región para apoyar de manera decidida las acciones encaminadas a la liberación inmediata de los rehenes y, en particular, del ciudadano mexicano Orión Hernández», apuntó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE, Cancillería) de México.
Además, expresó que «el Gobierno de México continuará realizando todas las gestiones necesarias hasta lograr su liberación y respaldará todo esfuerzo encaminado al establecimiento de una paz duradera en la región en estricto apego al derecho internacional».
El pasado 19 de enero, el presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró que su Gobierno «no toma partido ni por Israel ni por Palestina» pese a la remisión que envió el jueves a la Corte Penal Internacional (CPI) para que «investigue la probable comisión de crímenes de su competencia» en Gaza.
Sus declaraciones se dieron tras la remisión que México envió junto a Chile a la CPI que «obedece a la creciente preocupación por la última escalada de violencia, en particular en contra de objetivos civiles, y la presunta comisión continua de crímenes bajo la jurisdicción de la Corte», según explicó la Cancillería.
En tanto, la Embajada de Israel en México respondió en un posicionamiento que «lamenta el anuncio del Gobierno de México», pero ni López Obrador ni la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) mencionaron presuntos crímenes cometidos por Israel, al argumentar que buscan la paz.
El mandatario sostuvo que la remisión que México envió a la CPI es porque busca hacer todo lo posible «para ayudar al diálogo, a la paz, en este lamentable enfrentamiento, o como se le llame».
«Lo que está en el fondo, lo que debe preocuparnos a todos, es que se están perdiendo vidas y no podemos ser insensibles, ya son más de 20.000 muertos, hay que buscar la paz, no se trata de condenar a nadie, sino cómo parar esa guerra inhumana, cruel, eso es lo que México plantea», argumentó.