La dirección de Desarrollo Urbano y Ecología, en coordinación con la empresa de servicios Ingeniería Ecológica y Desarrollo Sustentable S.C., trabaja en el monitoreo de la especie Myiopsitta monachus, también conocido como perico monje, especie exótica invasora, mediante el programa de Guardián Ecológico.
Esta especie es nativa de Sudamérica, en donde se distribuye desde la parte central de Bolivia y el sur de Brasil hasta el centro de Argentina y es considerada como una especie exótica invasora ya que ha podido establecer poblaciones en países de América como Canadá, Estados Unidos, México, Puerto Rico, las Bahamas, las islas Caimán.
Por su parte, Diana González López, subdirectora de Ecología en el Municipio de Chihuahua, destaca que dada su habilidad para adaptarse a distintos tipos de clima y a su dieta tan variada, es una especie cuya presencia ha sido detectada en la capital, destacando la importancia de realizar monitoreos constantes y permanentes, ya que de acuerdo a la Comisión Nacional de la Biodiversidad una de las principales causas de pérdida de biodiversidad en todo el mundo son las especies invasoras, ya que cuando éstas logran superar barreras ambientales, llegan a reproducirse y establecer una nueva población viable fuera de su área de distribución natural que con el paso de varios años, puede modificar drásticamente su nuevo entorno.
“La ley general de vida silvestre establece que una población o un ejemplar exótico es aquél que se encuentra fuera de su ámbito natural y que pueden tornarse perjudiciales para las especies locales, pudiendo alterar o modificar al entorno natural y el resto de especies que si pertenecen a la capital, por lo que se debe tener en cuenta el cuidado adecuado” señaló Gonzalez Lopez.
Esta especie se registró por primera vez en México en 1999 en el estado de México a partir de entonces se ha reportado en la Ciudad de México y áreas adyacentes y en los estados de Puebla, Chiapas, Michoacán, Baja California Sur, Querétaro, Guanajuato, Morelos, Chihuahua, Veracruz, Guerrero y estado de México.
En lo anterior radica la importancia de contar con datos reales que arrojen información que sirva de apoyo a las políticas que en el orden correspondiente competa diseñar y al Municipio coadyuvar por la protección y conservación de la biodiversidad.