Durante la pandemia por Covid-19, las personas han sufrido depresión, ansiedad y estrés porque se han tenido que confinar en sus ciudades, respectivamente.
Tal fue el caso de un video que circula en redes sociales donde se puede observar cómo una mujer comienza a destruir cientos de botellas de alcohol de un supermercado.
Dicho momento se dio el pasado 25 de noviembre en la ciudad británica de Stevenage, Inglaterra, mismo que fue capturado por los visitantes del supermercado y que pronto se hizo viral en redes sociales.
La mujer cayó y se cortó las manos
En el audiovisual se puede observar a la mujer caminando sobre las botellas rotas que ella misma tiró con violencia; vino, ron y cerveza era lo que contenían las botellas.
Mientras tiraba botellas alcohólicas de los estantes, la mujer cayó al resbalarse con el líquido y los cristales rotos, mismos donde se cortó las manos; sin embargo, continuó tirando botellas.
Traslada al hospital y luego arrestada
La escena que circula en redes por parte de los internautas, terminó cuando un guardia de seguridad la sacó del lugar; se desconoce el motivo de su ira y acciones, pues los testigos comentan que la mujer no emitió ninguna palabra al respecto.
Cabe señalar que después de sertrasladada a un hospital para atender sus lesiones, posteriormente fue arrestada por las autoridades, quienes reportaron que rompió 500 botellas, por lo que los daños materiales ascienden a las 100 mil libras esterlinas (alrededor de 133 mil dólares).
Cofece multa a Walmart por prácticas monopólicas: la batalla legal apenas comienza
La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) asestó un golpe histórico al multar a Walmart de México con 93.4 millones de pesos tras concluir una investigación que se extendió por más de cuatro años. La razón: prácticas monopólicas relativas, particularmente en el trato con sus distribuidores.
Según el dictamen de la Cofece, Walmart aprovechó su posición dominante en el mercado para imponer condiciones desfavorables a los proveedores, afectando la competencia en el sector. Aunque no se han revelado todos los detalles de las “contribuciones” impuestas a los distribuidores, el veredicto destaca cómo estas prácticas distorsionan el acceso al mercado y perjudican a competidores más pequeños.
En respuesta, Walmart no tardó en reaccionar. La empresa anunció que impugnará la decisión y enfatizó su compromiso con el cumplimiento de las leyes mexicanas. En su comunicación oficial, destacó que la sanción carece de fundamento y que está basada en interpretaciones erróneas. Este movimiento era predecible: para una empresa de este tamaño, 93 millones de pesos no solo representan una cifra considerable, sino también una amenaza a su reputación.
Por otro lado, la Cofece también se juega mucho. Este caso es una muestra clara de su intención de reforzar la vigilancia sobre los gigantes corporativos. Sin embargo, una batalla legal prolongada podría poner a prueba su capacidad de defender sus resoluciones en tribunales.
Más allá de la multa, el caso de Walmart pone el reflector sobre una problemática común en el comercio minorista: el desbalance de poder entre grandes cadenas y pequeños distribuidores. Si bien el desenlace de este litigio aún está por definirse, el mensaje es claro: los días de actuar sin consecuencias podrían estar contados. La industria y los consumidores estarán atentos a cada movimiento en esta batalla judicial.