Las dos mujeres que fueron detenidas el pasado domingo tras arrollar a dos personas en Avenida del Imán casi esquina con Circuito Estadio Azteca, colonia Cantil del Pedregal en la alcaldía de Coyoacán se habrían dado a la fuga del restaurante ‘Birria Michoacanísimo’ aparentemente para no pagar la cuenta.
El restaurante se ubica en Avenida Santa Úrsula, al sur de la capital.
En videos compartidos a través de redes sociales se ve que el automóvil Chevrolet Sonic en color rojo con matrícula S81-AKX, abordado por dos mujeres, una de 24 años y otra de 43, se lanza sobre un grupo aparente de meseros que habría intentado detenerlas.
Posteriormente, en un segundo video compartido se observa al mismo vehículo arriba de un camellón, luego de que durante su huida arrolló a una mujer de la tercera edad y a un repartidor de UberEats que viajaba en una motocicleta con matricula 7G3LV a quien golpeó provocando que éste saliera proyectado desde el vehículo y quien fue identificado como Virgilio Pablo Martínez.
Al lugar de la emergencia donde se encontraba la mujer de 83 años, arribaron los socorristas de una ambulancia del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), quienes indicaron que falleció por traumatismo craneoencefálico. Fue identificada por su hijo de 42 años.
En tanto que el lesionado de 31 años fue atendido por socorristas de una ambulancia del ERUM y traslado de emergencia al hospital General Balbuena, ya que presentaba heridas lacerantes frontal, fractura en húmero, tibia y peroné de la pierna izquierda, así como fractura del lado izquierdo de la cadera.
En las imágenes se aprecia que los vecinos enardecidos rompieron el medallón trasero del vehículo particular en el que se hallaban las jóvenes en aparente estado de ebriedad y quienes hasta ese momento se habían negado a bajar u ofrecer alguna explicación a los oficiales sobre los acontecimientos.
Cabe mencionar que antes de quedar atrapadas en el camellón de Avenida del Imán, se saltaron uno más. En repetidas ocasiones las jóvenes se intentaron a dar a la fuga, sin embargo, por la posición en la que quedó el vehículo, les fue imposible.
De acuerdo con lo mencionado por el vecino, varios vehículos particulares y taxis resultaron dañados al ser impactados por el vehículo Sonic color rojo, cuyos conductores quedaron en la zona en espera de su seguro.
Una vez que lograron bajarlas del automóvil fueron llevadas a bordo de una patrulla de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) a la agencia del Ministerio Público Coyoacán 1. Mientras que al lugar arribó una ambulancia que ofreció atención médica al repartidor de UberEats.
Anthony Joshua dejó en claro la diferencia entre un excampeón mundial y una celebridad convertida en boxeador. El británico venció por nocaut técnico a Jake Paul en el sexto asalto de un combate de peso completo celebrado la noche del viernes en Miami, una pelea que desde su anuncio generó polémica por el contraste de experiencia, tamaño y trayectoria entre ambos contendientes.
El enfrentamiento, pactado a ocho rounds profesionales, despertó críticas por los riesgos que implicaba para Paul, quien llegó con marca de 12 triunfos y una derrota frente a Joshua, dos veces campeón del mundo y con récord de 28 victorias y cuatro caídas. Sin embargo, contra la mayoría de los pronósticos, el estadounidense resistió más de lo esperado y logró extender la contienda hasta bien entrada la segunda mitad.
Desde el inicio, Paul optó por el movimiento constante y el amarre, una estrategia evidente para consumir tiempo y evitar los golpes de poder del británico. Joshua, por momentos impreciso y visiblemente frustrado, tardó en encontrar su distancia, aunque poco a poco fue imponiendo su físico y su alcance.
En el quinto episodio llegaron los primeros momentos realmente críticos para Paul. Joshua conectó combinaciones más limpias, provocó dos caídas y estuvo cerca de finalizar el combate, aunque su rival logró sobrevivir con esfuerzo y algo de teatralidad, incluso recurriendo a gestos provocadores hacia el británico.
El desenlace llegó en el sexto round. Joshua salió decidido, conectó una derecha contundente que envió a Paul a la lona y, tras reincorporarse en evidente mal estado, el estadounidense recibió un uppercut y una nueva derecha al mentón que obligaron al réferi a detener la pelea. Paul terminó con el labio inferior partido, pero consciente y sonriente, reconociendo el cierre inevitable.
Más allá del resultado, el combate dejó sensaciones encontradas. Para Joshua, la victoria confirmó su superioridad sin que el análisis técnico vaya mucho más allá. Para Paul, haber llegado al sexto asalto frente a un peso completo de élite fue visto por algunos como una muestra de valentía y por otros como una peligrosa puesta en escena.
El debate sobre este tipo de cruces seguirá abierto, pero en el ring no hubo discusión. La experiencia y el poder de Anthony Joshua marcaron el final.