El DJ sueco Tim Bergling, conocido como Avicii, ha muerto a los 28 años este viernes en Mascate, la capital de Omán, según un comunicado de su representante.
El músico era uno de los artistas de pop electrónico más conocidos y vendedores de la actualidad, aunque se había retirado en marzo de 2016. «Con una profunda pena anunciamos la pérdida de Tim Bergling, también conocido como Avicii. Fue encontrado muerto en Mascate, Omán, este viernes por la tarde hora local, 20 de abril. La familia está devastada y les pedimos a todos que respeten su necesidad de privacidad en este momento difícil. No se darán más declaraciones», reza la nota.
Avicii anunció en marzo de 2016 oficialmente su retirada del mundo de la música. Antes de su adiós acumulaba cansancio. Entonces dijo que no se había recuperado en condiciones de una operación de apendicitis y algunos problemas biliares. En 2015 el DJ también canceló varias fechas a causa del agotamiento, algo que fue arrastrando hasta llevarle a su despedida definitiva hace dos años, cuando solo tenía 26 años.
Avicii era, sin lugar a dudas, uno de los grandes nombres de la nueva generación EDM, de triunfo internacional y capaz hasta su retirada de ser cabeza de cartel de grandes festivales en casi todo el mundo gracias a algunas de esas canciones de electrónica para todos los públicos que se adhieren a la memoria con una facilidad pasmosa. Su carrera no dejó de crecer desde que, en 2011, su hitLevels se convirtiera en una de las piezas más bailadas y pinchadas de la época. A continuación llegaron dos piezas que le hicieron todavía más popular y que fueron número uno en infinidad de países. Se trata de Wake Me Up! (cantada nada menos que por Aloe Blacc) y Hey Brother, que ya formaron parte del que fue su primer y exitoso disco, True (2013), un trabajo en el que el sueco experimentó con diversos géneros ampliando su paleta estilística sin alejarse de su cara más comercial, añadiendo incluso el country a su estilo.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.