Cristina tiene 16 años y hace un mes se ausentó voluntariamente de Casa Alianza, el hogar sustituto donde vivía. Ella llegó ahí luego de que el DIF de la Ciudad de México obtuvo su custodia por parte de la Procuraduría General de Justicia capitalina, que certificó que sufría violencia por parte de su madre.
Los problemas de esta joven comenzaron a los 12 años cuando le confesó a su madre que era lesbiana. “Mi mamá es una persona muy violenta, sólo dejó de golpearnos a mi hermano y a mí cuando nosotros se lo impedimos. Ella se entera que yo soy lesbiana, tenía unos 12 o 13 años, y desde ahí me decía, ‘¿cómo mi hija va a ser lesbiana? Tú no puedes ser lesbiana’”, explicó.
En ese momento la situación en casa de Cristina era muy tensa y su abuela ofreció cuidarla en Veracruz. La entonces niña se fue a radicar a dicha entidad donde terminó la secundaria y regresó con su madre ya que logró su ingreso a laPreparatoria 4 de la UNAM.
Pero los problemas de Cristina no cesaron, por lo que a finales de 2016 decidió irse a vivir con un amigo. Fue en ese momento que su madre denunció el hecho a las autoridades y acusó al amigo de corrupción de menores.
Policías de Investigación encontraron a la adolescente y comenzaron un proceso judicial contra su amigo. Era diciembre y Cristina pasó la Navidad en el MP, en donde ningún familiar acudió a visitarla. Posteriormente fue ingresada a Casa Alianza, una institución de puertas abiertas. Ahí permaneció algunos meses pero el ambiente era complicado por lo que decidió regresar con su amigo.
A pesar de que Cristina había decidido no regresar a la casa-hogar buscó a las autoridades del DIF capitalino para evitar que su amigo fuera inculpado nuevamente ya que su madre aseguraba que el hombre la había seducido.
Gamaliel Martínez, director del DIF de la Ciudad de México, detalló que cuando Cristina se ausentó voluntariamente de Casa Alianza se dio parte a la PGJ capitalina. Señaló que la adolescente “no es una delincuente, no podemos tenerla recluida en ningún lugar”, y fue ella misma quien regresó al DIF para aclarar su situación.
En los próximos días Cristina será integrada a un hogar ajeno. Se trata de una familia formada por madre y padre y una hija, quienes cuidarán de ella.
En entrevista, Penélope Campos, diputada encargada del tema de la niñez en la Asamblea Legislativa, dijo que el caso de Cristina es un ejemplo del trabajo que se desarrolla en el DIF capitalino y de la importancia de privilegiar el interés superior de los niños.
Por su parte, Nashieli Ramírez, experta en asuntos de la niñez, pidió a la madre de Cristina que reconstituya la relación con su hija.