Los espectadores podrán ondear banderas de arcoíris, un símbolo gay, durante la Copa del Mundo del próximo año en Rusia, dijo el principal funcionario del país encargado de combatir la discriminación en el futbol.
Alexei Smertin, dirigente de la federación rusa de futbol y embajador del Mundial, dijo que los fanáticos no serán afectados por la ley rusa que prohíbe la “propaganda” homosexual dirigida hacia menores de edad.
«Definitivamente no habrá ningún veto a los símbolos del arcoíris en Rusia. Es claro que pueden venir acá y no serán multados por expresar sus sentimientos”, dijo Smertin en una conferencia de prensa en Moscú para discutir los problemas de racismo y discriminación en el futbol.
El exmediocampista de la selección de Rusia y de Chelsea agregó que es improbable que los fanáticos gay tengan problemas con las leyes rusas.
“La ley tiene que ver con la propaganda dirigida a los menores… imagino que nadie va a ir a hablar a las escuelas”, indicó.
Sus expresiones fueron aplaudidas por la red FARE, que asesora a la FIFA sobre asuntos de discriminación.
“Está ofreciendo garantías, y creo que al final es todo lo que la gente quiere”, dijo la directora ejecutiva de FARE, Piara Powar. “La gente quiere saber que puede venir acá y que estarán seguros, que serán protegidos, que son bienvenidos”.
La homosexualidad fue considerada como un delito en Rusia hasta 1993, y la homofobia todavía es generalizada en el país. Rusia aprobó una ley que prohíbe la propaganda homosexual entre menores de edad en 2013, aunque la medida ha sido considerada como una manera de prohibir manifestaciones gays en espacios públicos.