Este fin de semana, la tormenta tropical Marco perturbó la paz paradisíaca de Quintana Roo.
Según el pronóstico de trayectoria, el centro del sistema tocaría tierra en la noche del domingo en algún punto de la entidad, así que se emitieron alertas, se cerraron puertos y playas, se abrieron albergues temporales y los pescadores locales aseguraron sus pequeñas embarcaciones.
En los municipios de Felipe Carillo Puerto, Tulum, Solidaridad, Cozumel, Puerto Morelos, Benito Juárez, Isla Mujeres y Lázaro Cárdenas, se declaró alerta amarilla o de “peligro moderado”, por un posible impacto del ciclón. La reacción de las autoridades estatales fue rápida, y en seguida se activaron distintos refugios públicos. Sin embargo, en la mañana del sábado, el sistema cambió el rumbo esperado.
La tormenta tropical Marco no siguió las predicciones de los meteorólogos, y pasó por el canal de Yucatán, sin adentrarse en territorio mexicano.
“De acuerdo al último pronóstico de las 7 am, la tormenta tropical MARCO ha cambiado su trayectoria hacia el norte. Con ello, el centro de la tormenta ya no hará impacto con el Estado y seguirá su ruta sobre el mar. Nos mantenemos atentos a su paso por cualquier cambio que ocurra”, informó entonces el gobernador del estado, Carlos Joaquín González.
Aunque el sistema no tocó tierra en el país, sus bandas nubosas dejaron lluvias fuertes en Yucatán, Campeche y Quintana Roo. Además, se registraron rachas de viento de 60 km/h y oleaje de hasta tres metros de altura en zonas costeras de Yucatán y Quintana Roo.
En Cancún, joya turística del Caribe mexicano, los brazos de la tormenta se desplegaron durante el sábado, y forzaron a colocar la bandera roja en sus playas. El día se mantuvo nublado, tal y como se aprecia en imágenes compartidas en redes sociales.
A primera hora de este domingo, el vórtice de Marco se encontraba a 285 kilómetros al norte de Cabo Catoche, en Quintana Roo. Durante el día se alejará cada vez más de México, desplazándose por el Golfo de México en dirección nor-noroeste, hacia EEUU, donde se espera que toque tierra este lunes, en algún punto de Luisiana. Si las previsiones se mantienen, para entonces se habrá convertido en un poderoso huracán.
Fuente: Infobae