El INAI ordenó a la Secretaría de Salud hacer público el número de personas afectadas en su estado físico y las repercusiones en su estado actual de salud por el derrame de más de 40,000 metros cúbicos de lixiviados de cobre en el Río Sonora ocurrido en agosto de 2014.
Con esta orden, Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) pretende responder a un particular que solicitó a la dependencia se conociera sobre las repercusiones de aquel derrame del que una de las empresas mineras del Grupo México fue señalada como responsable.
“El pleno del INAI resolvió un recurso de revisión presentado por un particular inconforme con la respuesta del sujeto obligado (la Secretaría de Salud), quien en un primer momento se declaró incompetente para atender la solicitud y recomendó dirigirla a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios y a la Secretaría de Salud del estado de Sonora”, dijo el INAI en un comunicado.
En la etapa de alegatos, la Secretaría de Salud turnó la solicitud a diversas unidades administrativas; sin embargo, hasta la resolución del recurso no demostró haber encontrado y entregado la información reclamada por el particular.
Pero el INAI determinó que la Secretaría de Salud sí es competente para atender la solicitud, ya que cuenta con atribuciones legales para actuar en casos de deterioro súbito en el ambiente que pongan en un peligro inminente a la población.
“Se tiene información pública de que el sujeto obligado (la Secretaría de Salud) ha realizado diversas acciones de monitoreo y atención médica especializada en dermatología, psicología, epidemiología y combate de vectores a la población afectada por el derrame de lixiviados al Río Sonora”, añadió el INAI.
Por lo anterior, el INAI revocó la respuesta de la Secretaría de Salud y le ordenó realizar una búsqueda exhaustiva del número de afectados en su salud, así como su estado actual a causa del derrame de lixiviados de cobre en el río Sonora.
La orden del INAI alcanza a todas las unidades administrativas que pudieran contar con los datos; sin omitir a la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud, la Dirección General de Epidemiología, la Dirección General de Promoción de la Salud, la Dirección General de Información en Salud y al Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades.
Ácido sulfúrico en ríos de Sonora
En agosto de 2014, la empresa Buenavista del Cobre fue señalada como la causante de una catástrofe medioambiental en los ríos Sonora y Bacanuchi de Sonora, que en la primera de sus repercusiones afectó el suministro de agua potable de 21,000 familias de las localidades vecinas.
En esas fechas, las autoridades federales responsabilizaron a Buenavista del Cobre, propiedad de Grupo México, de haber derramado accidentalmente más de 40,000 metros cúbicos de ácido sulfúrico en aquellos ríos, con lo que además de las familias, también la flora y fauna locales se verían afectadas.
La Procuraduría General de la República (PGR) cateó entonces las instalaciones de Grupo México en Cananea, Sonora, para conocer de los responsables e información sobre el derrame.
El cateo de las instalaciones de Buena Vista del Cobre derivó de una acción legal presentada por la Profepa contra Grupo México el 18 de agosto de ese año, ante el derrame de sustancias tóxicas en los ríos Sonora y Bacanuchi.
La legislación penal mexicana en materia de delitos ambientales establece sanciones económicas por hasta 20 millones 187,000 pesos y penas de presión de hasta nueve años.
Buena Vista del Cobre es una minera que aporta el 18.8% del cobre que Grupo México produce a través de todas sus filiales.