Manny Pacquiao dijo que contempla pelear por Filipinas en los Juegos Olímpicos si el boxeo en Río de Janeiro abre sus puertas a los púgiles profesionales.
Su promotor, sin embargo, cree que la idea de que los profesionales peleen en Río, y más aún alguien como Pacquiao, es descabellada.
«La idea de permitir que los profesionales participen en los Olímpicos con tan poca anticipación es completamente absurda», dijo el promotor Bob Arum. «Debería examinarle la cabeza a esta gente».
El jefe del organismo rector del boxeo internacional propuso que los profesionales participen en los Juegos, aunque es improbable que esa idea sea implementada en Río porque ya se han realizado torneos clasificatorios en la mayoría de los países.
«No digo que vaya a pelear o que no vaya a pelear», indicó. «No cierro la puerta, lo estoy pensando».
Pacquiao es candidato al Senado en Filipinas, y un triunfo en las elecciones este mes podría poner fin a su carrera en el cuadrilátero para dedicarse a tiempo completo a la política. Pero la posibilidad de pelear por su país en los Juegos también podría ser una forma de ganar votos.
Ningún filipino ha ganado una medalla de oro en unos Juegos, aunque sus boxeadores tienen cinco medallas de plata y bronce.
El entrenador de Pacquiao, Freddie Roach, cree que el púgil de 37 años se ha revitalizado en su entrenamiento para la pelea con Bradley, y que le quedan unos cuantos combates. Pacquiao dijo previamente que se retiraría después de la pelea, aunque luego ha cambiado de parecer.
«Me preguntó si lo entrenaría si dejan que los profesionales peleen en los Juegos Olímpicos», relató Roach. «Por supuesto que lo haría».
Pacquiao y Bradley pelearán por tercera vez. Bradley ganó la primera en una polémica decisión, y Pacquiao dominó el segundo encuentro.
El promotor Bob Arum dijo que no vislumbra a Pacquiao peleando contra amateurs de un nivel muy inferior en los Juegos.
«Los profesionales pueden jugar al básquetbol en los Juegos Olímpicos», dijo Arum. «Pero en el basquetbol sólo clavas el balón en la cara de alguien, no es un deporte en el que lastimas a alguien. Si juntas a profesionales con amateurs, puede haber consecuencias graves».
Vanguardia