Cuando Manny Pacquiao se preparó para su primera pelea tenía 16 años. Cuatro días antes de aquel combate, según publicó The Philippine Star, el boxeador se trasladó al puerto de Manila (capital de Filipinas), pagó mil pesos a un lanchero (20 dólares estadounidenses) y viajó tres horas a Mindoro, provincia de ese país, para encarar en peso mosca (máximo 51 kilos) a su compatriota Edmund Enting, a quien venció en cuatro asaltos.
Pasaron 21 años desde aquel combate. Mañana boxeará en la división de los welter, cinco divisiones arriba y 18 kilos por encima de su debut. Las Vegas será la ciudad en la que el púgil pondrá fin a su brillante carrera frente a Timothy Bradley.
“Es el mejor peleador que yo he visto en muchas décadas. Es histórico para su país, para la historia del boxeo. Su estilo siempre fue singular. Es un hombre con todos los atributos que la naturaleza le pudo dar para boxear. Es veloz, explosivo, tiene buen ataque y buena defensa. Esa ha sido la clave por la que ha ganado tantos títulos”, expresa Ignacio Beristáin, entrenador y miembro del Salón de la Fama de Boxeo.
El filipino ganó ocho títulos mundiales en siete pesos diferentes. Tiene récord de 57 victorias (38 por nocaut), seis derrotas y dos empates. De acuerdo con la revista The Ring, es uno de los mejores peleadores de la historia en pesos medianos. En 2010, el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) lo nombró boxeador de la década, entre el año 2000 y el mismo 2010.
“Cuando yo lo enfrenté, se caía de hambre. Así lo recuerdo en el pesaje. Pero cuando subimos al ring vi un peleador cambiado, diferente. Estaba bien comido y musculoso. Era una persona completamente diferente. Mi esquina me decía que lo habían visto con un líquido que bebía mucho, yo nunca me di cuenta. Yo no me preparé bien en esa pelea y él con un golpe de suerte en el tercer round me tumbó y el referí contó muy rápido. Así me ganó”, recuerda Emmanuel Lucero, segundo púgil mexicano que enfrentó y venció Pacquiao.
En 2009, Floyd Mayweather propuso a Bob Arum y a otros promotores una pelea con el filipino con la condición de que Pacquiao se hiciera un examen antidopaje de estilo olímpico, a lo que el asiático se negó. El estadounidense contraatacó y comentó que si Manny no lo hacía era porque consumía sustancias ilegales.
“Mucha gente ha hablado estupideces en cuanto a que usaba anabólicos. Me quedo con el atleta limpio. Es una falta de respeto que a un boxeador de la dimensión de Manny se le acuse de haber tomado sustancias ilegales, son tonterías”, señala Beristáin
El duelo del sábado será el tercero en la historia entre Pacquiao y Bradley. El estadounidense se llevó el primero en decisión dividida. En el segundo enfrentamiento el filipino obtuvo la victoria por decisión unánime.
“Hay una gran diferencia entre ambos peleadores. Ambos son buenos, sí. Pero Pacquiao es fuerte, rápido y agresivo. Ese es el boxeo de él. Bradley tiene muchas facultades, pero le falta valor en el ring. Ganará Pacquiao”, agrega Beristáin.
Juan Manuel Márquez y Mayweather fueron determinantes en el adelanto del retiro de Pacquiao.
El Financiero