Luego de ir ganando con amplia ventaja a Panthers le valió el colchón de puntos obtenidos en la primera mitad para vencer a los Sehawks 24-31. Con este resultado los de Carolina pasan a la final de la NFC en donde se medirán ante los Cardinals.
Panthers no se anduvo con reservas y le bastaron cuatro jugadas para abrir el marcador por conducto de Jonathan Stewart. Todo fue por tierra y la defensa de Seattle comenzaba a quedar puesta en evidencia desde temprano.
Las cosas no mejoraron en el primer drive de los Seahawks. Encajonados en las primeras yardas Russell Wilson lanzó un pase apurado que fue interceptado por Luke Kuechly, a quien le bastó correr 14 yardas para poner el marcador 0-14.
A Wilson no le quedó más que recomponer ante ante el temporal inminente. Lo hizo poco a poco, combinando pases con carreras por conducto de Lynch con la intención de ir desgastando a la defensa local.
Sin embargo, la actuación de la línea ofensiva de Seattle rayaba en lo vergonzoso echando por la borda los intentos de su quarterback por recomponer el rumbo perdido de manera tan prematura. Quedaba en manos de la defensiva de los Seahawks contener el aplastante paso de Cam Newton y compañía.
Y sí, los detuvieron… Sólo un poco. Lo suficiente como para que les llevara más tiempo a la zona de anotación. Lo que se mantuvo fue el incremento de la ventaja, de nuevo por medio de Stewart. Apenas iniciaba el segundo cuarto y Seahawks ya se encontraba abajo por 21 puntos.
Para Newton y compañía el juego fue un día de campo en los primeros dos cuartos. Foto: @Panthers
Para Newton y compañía el juego fue un día de campo en los primeros dos cuartos. Foto: @Panthers
Una intercepción más a Russell le daba un toque lapidario al dominio de los locales que materializaron dicha oportunidad con un gol de campo. Los de Seattle comenzaban a verse obligados a uno de los regresos más épicos en la historia de la NFL.
Sin embargo llegó un touchdown local más. Ahora Cam Newton varió y conectó por aire con Greg Olsen que ponía el marcador 0-31. Las apuestas ya no eran por ver quien ganaría el partido sino para adivinar en que momento dejarían de anotar los de Carolina.
Un poco de orgullo propio le brotó Wilson que, por mérito propio, avanzó más yardas que todos sus corredores. Los intentos sólo le valieron llegar a red zone en dos ocasiones al final de la primera mitad. Sin embargo, una conversión en cuarto down no concretada y luego un fallido gol de campo sólo prolongo la agonía… y el cero para los visitantes. A los Seahawks todo les había salido mal y apenas era el medio tiempo.
La respuesta de los de Seattle llegó hasta el tercer cuarto. Wilson por fin tuvo una conexión acertada en las diagonales y Jermaine Kearse no la desperdició. Un 7-34 no parecía muy prometedor, pero al menos era el inicio de algo. ¿De qué? De lo que fuera con tal de reducir esa ventaja lo más posible.
El papel de Stewart al inicio del juego fue fundamental para que Carolina lograra la victoria. Foto: AP
El papel de Stewart al inicio del juego fue fundamental para que Carolina lograra la victoria. Foto: AP
Si bien, la linea ofensiva de Seattle seguía siendo vulnerable, comenzó a tomárselo más en serio y, entre escapadas de Wilson y envíos largos, finalmente Tyler Lockett ayudó a poner el marcador 14-31 al atrapar un pase de 33 yardas en el último rincón disponible de las diagonales.
De lado de Panthers las cosas iban en sentido contrario. Newton empezó el tercer cuarto con tres ofensivas estériles que terminaron con despejes. Por su parte, Kearse se convirtió en una pesadilla para la defensiva de los Panthers y con un potente salto aprisionó un pase de Wilson que luego de un punto extra exitoso puso las cosas 21-31. La remontada no parecía tan descabellada, pero restando menos de siete minutos el tiempo se convertía en otro factor a tomar en cuenta.
Como si la visita necesitara más presión encima, al cronómetro también se le sumaron los castigos y, tras un acarreo que estuvo plagado de pañuelos amarillos, Seahawks se tuvo que conformar con alcanzar el 24-31 faltando unos segundos.
La apuesta por el despeje corto no sirvió y Thomas Davis le dio a los Panthers la serie ofensiva que los locales esperaban. El reloj se consumió y ni los tiempos fuera de Seattle pudieron frenar lo inevitable, que ocurrió a pesar de todo.
Seattle cayó con la cara al sol y Carolina estaba listo para recibir a Arizona en la final de la Conferencia Nacional. La próxima semana la NFC tendrá un nuevo campeón.
SinEmbargo